Los estados con problemas para aumentar en días su gobernabilidad, manipulan las ideas con la ventana de Overton. Pero ¿es esto hoy tan actual? Parece novedoso el cambiar el punto de vista para llegar a aceptar nuevos conceptos contrarios a la lícita opinión ciudadana, como propone Overton.
Hay un ejemplo artístico en nuestro museo catedralicio, y existen al menos otros tres ejemplos más en Valladolid, Toledo y Nueva York que ilustran formalmente la misma idea sobre el punto de vista, es la llamada anamorfosis en un retrato de Carlos V. Si se observa el cuadro de frente, a una distancia acostumbrada de medio metro, aparecen unas manchas de color que muchos llaman «el pez espada», pero si se mira cambiando el punto de vista a través de un agujero lateral del marco, encontramos el retrato del emperador Carlos V, que algunos atribuyen a Lucas Cranach. 
O sea, que para penetrar con corrección en estas obras se deben mirar por un lado, en nuestro caso el izquierdo, admirándose como reza en el marco «Mirum natura et artis». La forma de mirar es lo importante para descubrir una anamorfosis óptica. 
En la política actual, si nos dicen que debemos aprobar la amnistía, al estudiarla nos sorprenderá que es solo un apaño para seguir gobernando, que nos provocará un agravio comparativo con los sujetos amnistiados porque a ellos se les anula el delito y nosotros tendríamos que pagar entre rejas. ¿Son ellos, los separatistas condenados, superiores a nosotros? ¿Esa es la equidad dentro de una nación? Las amnistías anteriores tienen otro justificadísimo origen: trazar una raya para partir de una igualdad que en este caso no se va a dar, porque se continuará con el delito, el desgajamiento de España.
En Palencia tenemos con forma artística la plástica del cambio de opinión a través de un nuevo punto de vista, como hicieron Masaccio, Ucello o Piero de la Francesca y hasta el propio Durero y ha podido existir así cinco siglos. Si no conocen el perfil de la pintura los animo a visitarlo intramuros. No se arrepentirán.
Señores del Gobierno, la tagarnina no es novedad, aunque haya estado años sin fumarse. No nos líen.