Este Miércoles Santo pasado, el peso de la programación el ciclo declarado de interés turístico internacional recayó en la Hermandad Franciscana de la Stma. Virgen de la Piedad, del Sto. Cristo Señor de la Vida y de la Muerte y de San Francisco de Asís.
Así, en la iglesia penitencial de San Agustín, durante todo el día se celebró la Veneración a Ntra. Sra. de los Ángeles. Palencia se volcó ayer con la Virgen franciscana en el día en que hubiera procesionado hasta Allende el Río junto con el Santo Cristo Señor de la Vida y la Muerte. La sagrada imagen estaba ataviada recreando la vestimenta franciscana en honor a su dignidad como Reina de la Creación. Estrenó saya de brocado marrón en oro reproduciendo dibujo antiguo, juego de seis camafeos de plata con reproducciones pictóricas de la vida de San Francisco de Asis, juego de tres estrellas de plata y brillantes y media luna de plata, obra de orfebrería Juan Hernéndez, que refuerza la iconografía de la imagen. Todo ello han sido donaciones realizadas a Nuestra Señora de los Ángeles.
La Cofradía Franciscana celebró, al igual que en años anteriores, el ejercicio de las Tinieblas en el interior de la Iglesia de San Agustin. Una celebración que se realizó a oscuras con la simple luz de las velas, recreando el espíritu franciscano. Para concluir este singular Miércoles Santo, se celebró un Vía Crucis con el Santo Cristo Señor de la Vida y la Muerte por el interior de la Iglesia a hombros de sus cargadores, finalizando ante las plantas de Ntra. Sra. de los Ángeles a hombros de sus cargadoras.