Bajo un sol de justicia, que fue la nota predominante durante toda la jornada de ayer en Guardo, decenas de jóvenes se lo pasaron a las mil maravillas en una de las novedades de la programación de este año: la Fiesta de la Espuma.
Minutos antes de dar comienzo, la plaza de la Constitución era un hervidero de familias que acompañaban a los pequeños al contacto directo con el agua y el jabón. No faltaron chanclas, bañadores y hasta gafas de buceo para estos pequeños intrépidos que se enfrentaban de tú a tú con el dispensador de la espuma.
Poco a poco, el volumen iba aumentando, al igual que lo hacía el entusiasmo de los pequeños. Las risas y las carreras de uno a otro lado del recinto se sucedían.
Mientras, padres y abuelos contemplaban desde la barrera el espectáculo, no sin sacar a relucir cámaras de fotos, vídeos y teléfonos móviles para inmortalizar el momento.
Además, la atracción contó con acompañamiento musical, lo que hizo que los asistentes disfrutaron aún más al compás de los temas más conocidos del momento.
CASTILLOS HINCHABLES. Una vez dieron por finalizada la Fiesta de la Espuma, los más pequeños regresaron a sus hogares para retomar fuerzas para la intensa agenda que les esperaba por la tarde.
Con las energías renovadas, los pequeños volvieron a la plaza de la Constitución donde les esperaba un parque de hinchables gratuito con temáticas de lo más variado.
Castillos, batallas de gladiadores, rampa tobogán, toro multiobstáculo y balanzbikes hicieron las delicias de los más pequeños de la localidad minera y municipios cercanos que estos días disfrutan de unas jornadas de descanso.
Pero la cosa no quedó ahí. Muchos de ellos continuaron su peculiar celebración en el Recinto Ferial situado en las inmediaciones de la avenida San Miguel.
Allí les esperaban, como cada año por estas fechas, alrededor de una treintena de atracciones para todos los gustos.