MARTA REDONDO / BARRUELO DE S.
Para los amantes del motor, de ese olor a gasolina, de quemar rueda y sentir el aire fresco del norte, recorrer los bellos parajes de la Montaña Palentina y sobre todo de vivir unos días junto a otros amantes de las dos ruedas venidos de diversos lugares de la geografía nacional, hay una cita que desde hace ocho años está marcada en el calendario y a la que nadie quiere faltar.
Esa cita comenzó el viernes pero vivió ayer su jornada más importante con la llegada de casi trescientos moteros procedentes de la comarca, la provincia, la región, Cantabria, Asturias, País Vasco e incluso Zaragoza o Barcelona a la VIIIQuedada Motera de Barruelo de Santullán.
Desde primera hora de la mañana de ayer la plaza del Ayuntamiento se llenaba de Kawasaki, Harley Davidson, BMW y otras máquinas, que eran observadas con admiración por vecinos y visitantes.
«Podemos decir que es una concentración que ya se ha consolidado. Tenemos mucha gente de fuera que viene todos los años», afirmaba José Baquerín, presidente de la Asociación Cultura y Tradición del Valle de Santullán que, junto a la Asociación Deportiva MC organiza la acción, y cuentan con la colaboración para su desarrollo de las peñas, asociaciones, Ayuntamiento y Cruz Roja de Barruelo.
La primera de las rutas realizadas ayer por la mañana llevó a los participantes hasta la Cueva de los Franceses y el Mirador de Valcabado, muchos de ellos pudieron recorrer el complejo kárstico. Los asistentes a la concentración barruelana también tenían la oportunidad de conocer los centros museísticos de la localidad -Museo Minero y Mina Visitable y Museo de Herminio Revilla-.
Tras la comida y los juegos moteros, donde demostraron su pericia, se desarrolló la segunda de las rutas con la que los amantes de las dos ruedas se trasladaron hasta la vecina localidad cántabra de Matamorosa. El día culminó con una parrillada de vuelta en Barruelo.
Broche de oro. Para la presente jornada la organización de la VIIIQuedada Motera barruelana ha previsto el recorrido más largo.
Será de 77 kilómetros y partirá a las 12 horas de Barruelo de Santullán, transitará por Cervera de Pisuerga, llegando hasta Ventanilla e incluyendo también la zona del pantano de Ruesga , una de las novedades de la presente edición.
Una comida a las 14,30 horas en el Alto Tomillo, además de la entrega de premios a la motocicleta de mayor cilindrada, el motorista llegado de más lejos, el participante más joven y el más veterano pondrá el broche de oro a la concentración, en cuya organización colabora cerca de medio centenar de personas de la comarca.