La causa de los homicidios de Mari Luz Alejo y Amelia Rodríguez cometidos el miércoles en Abadiño (Vizcaya) por Benito Quintairos sería, supuestamente, una discusión familiar por motivos económicos, según han confirmado fuentes del Departamento vasco de Seguridad.
Esta hipótesis es, al menos, la que cobra fuerza para la Ertzaintza, mientras el acusado del doble crimen pasará a disposición judicial a lo largo de hoy bajo la acusación de homicidio.
Por el momento, el detenido, Benito Quintairos, permanece en dependencias de la Ertzaintza en Durango, a las que fue conducido poco antes de las ocho de la tarde del miércoles para prestar declaración.
Los indicios recogidos en la carpintería, así como otros datos de la investigación recopilados por la Policía vasca, avalaron la detención de Quintairos bajo la acusación de homicidio.
Otras fuentes de la investigación consultadas por Europa Press confirman que el arrestado confesó, durante su declaración, la autoría de ambos crímenes. Está también previsto que, a lo largo de la mañana de hoy, se conozca el resultado de la autopsia practicada a la esposa del supuesto homicida, Mari Luz Alejo, y a su suegra, Amelia Rodríguez.
«enérgica condena» del parlamento vasco. El Parlamento vasco expresó ayer su «más enérgica condena» y «absoluto rechazo» a las muertes de Mari Luz Alejo y Amelia Rodríguez, y ha invitado a la ciudadanía a adoptar «compromisos personales y colectivos a favor de la igualdad entre mujeres y hombres».
Esta es la declaración institucional que la presidenta del Parlamento vasco, Bakartxo Tejeria, leyó al comienzo del pleno para condenar el doble crimen, lectura que finalizó con un minuto de silencio.
La Cámara expresó su «más enérgica condena» y «absoluto rechazo» a las muertes de Mari Luz Alejo y Amelia Rodriguez, víctimas de otro presunto «homicidio de violencia contra las mujeres», y mostró su apoyo y condolencia a los familiares y allegados de las víctimas.
Tras condenar estas muertes, también rechazó «toda manifestación de violencia contra las mujeres o de discriminación sexual», e hizo referencia al caso «especialmente grave» vivido en Bilbao este fin de semana, en el que un hombre acuchilló a su expareja y, luego, se tiró a las vías del tren en el barrio de Bolueta, donde falleció tras ser arrollado por un convoy.
El Parlamento vasco entiende que la violencia sexista es «la expresión más grave de las desigualdades entre mujeres y hombres, derivadas de las relaciones de poder y de sometimiento de las mujeres».
En este sentido, invitó a la ciudadanía a adoptar «compromisos personales y colectivos a favor de la igualdad entre mujeres y hombres», e instó a las Instituciones «que tenemos una responsabilidad crucial en su erradicación», a que «desarrollemos planes integrales dotados de los recursos necesarios para lograr su definitiva desaparición.
Por ultimo, espera que no se vuelva a producir «ningún acto de violencia contra las mujeres y, mucho menos, asesinatos como el que ha costado la vida a Mari Luz Alejo y Amelia Rodriguez».
«era una grandísima persona». Compañeros de trabajo de Mari Luz Alejo se concentraron ayer, al mediodía, ante la empresa CIE Inyectametal del barrio de Matiena, en la localidad vizcaína de Abadiño, para expresar su repulsa por el crimen.
Aproximadamente un centenar de personas guardó cinco minutos de silencio en memoria de Mari Luz. Los concentrados no portaban pancartas y se limitaron a alabar a su compañera de trabajo fallecida tras concluir el acto de protesta por el doble crimen.
«Era una grandísima compañera», aseguraron, para destacar que se encuentran totalmente «consternados» por el luctuoso hecho.
El acusado
Familiares gallegos del acusado del doble crimen de Abadiño (Vizcaya), Benito Quintairos, natural de Cualedro (Ourense), lo definen como «hombre modelo, buena persona y campechano».
Así lo manifestó ayer en declaraciones a Europa Press, el alcalde de Cualedro, Luciano Rivero, tras haber hablado con familiares del detenido por la muerte de su esposa y su suegra en Euskadi.
El regidor, que precisó que no conoce personalmente al detenido por el doble homicidio, recordó que el hombre se fue con 16 años al País Vasco y «solía acudir al pueblo en periodos vacacionales», especialmente en verano.
Familiares y vecinos lo describen como «un hombre muy conversador» al que le «encantaba jugar al fútbol y estar con los amigos», según precisó el alcalde, que añadió que están todos «consternados» y «no se mentalizan de que pudiera hacer eso».
El alcalde condenó lo sucedido y expresó su «repulsa a todo tipo de violencia de género».