Cuando Jorge Cancho, director de Diario Palentino, desde hace mucho tiempo encargado cada viernes de llevar mis artículos a la tercera, me sugiere la idea de una nueva sección, no tardo ni un mes en proponerle este repaso a nuestra fauna. He de aclararles que hay animales que no he visto en la vida, animales que andan por nuestros montes, como el tasugo o la abubilla que abordamos hoy. José Luis Estalayo es un hombre curioso (ya somos dos) y con una buena cámara -ahora también un dron-, y mucha paciencia, va captando esas sinfonías que suenan en los bosques y que se nos escapan a la gran mayoría de los habitantes de esta tierra. Para eso hay que madrugar, aprovechar las primeras horas, la hora mágica de los atardeceres y no desperdiciar ningún momento porque cada imagen es diferente. «Encontrar la cellisca cuando al aire hace remolinos con la nieve o encontrarse con un fuerte vendaval era un golpe de suerte». Espero que los lectores encuentren un momento para distraerse y, especialmente, para valorar el mundo faunístico que nos acompaña, no solo las especies amenazadas como el oso pardo.
Este fotógrafo, que ha trotado por todos los bosques de nuestra montaña, asegura que es muy difícil encontrar una abubilla, pero que la localizó en varios puntos de La Pernía. Dice que se trata de un ave muy peculiar: «caminas en silencio por el bosque y cuando detecta tu presencia pega un grito para que todo el mundo busque un resguardo». Lo mismo sucede si pasa un corzo, pega el mismo grito y de esa forma uno sabe por dónde hay animales en movimiento. En la red se comenta que su canto es un reclamo hueco y habitualmente trisilábico «up-up-up». Son aves sagradas en el Antiguo Egipto y curiosamente aparecen en el Antiguo Testamento, tal vez -añaden los que hablan de ella- por su dieta y fetidez, aunque los ornitólogos exponen algunas razones por las que esta ave debe ser protegido.
Cuaderno de anotaciones y curiosidades
Aunque la mayor parte de Europa parece tener una población estable se considera extinta en Suecia, necesita cuidado en Polonia y se ha estabilizado en Suiza.
Enespañol, la abubilla recibe diversos nombres, que suelen ser onomatopéyicos, con aliteraciones que intentan reproducir su característico canto. En Andalucía se la conoce como gallito de marzo, en Aragón cucuta, en Canarias apupu o tabobo.
En Galicia recibe el nombre de bubela y en Murcia parputa. En la comarca leonesa de la Maragatería se la conoce con el nombre de budibilla.
En algunos pueblos de Burgos, bubulilla y en Ávila se la conoce como abubute.
En el blog de aves de JuanManuel Aguado,(bird-pajaros.blogspot.com) se dice que las abubillas vienen en la época estival al norte de la provincia y hacen sus nidos en los montones de piedras que los agricultores apilan.
En el blog La Abubilla Vintage comentan que esta ave se considera enChina como un símbolo de la buena suerte y como mensajero de las buenas noticias.
Monette, en La Gaceta de Salamanca, escribe: «la abubilla, un pájaro muy bonito, pero no lo cojas, y menos metas la mano en su nido, ya que te costará unos días desprenderte de ese olor por mucho que te laves»
En el blog de Animalia explican que se trata de una especie diurna, solitaria, territorial y migratoria.
En la web Aves y Pájaros, explican su comportamiento, cómo se asea el plumaje y se baña en tierra. «Al alimentarse, despliega sus alas y cola sobre el suelo. Es como si se secara al sol»
Otros estudios indican que las hembras prefieren a los machos que cantan con estrofas largas. La longitud del canto parece ser un factor para escoger pareja.
Refranes, citas y aforismos: ¿Qué tiempo hará, según las urracas, las abubillas y las vacas? Si canta la abubilla, buena está la orilla.Apestar más que un nido de abubillas.