Este mes llega a su fin el contrato del servicio de transporte urbano después de una década en la que Palbús, la Unión Temporal de Empresas formada por Alsa y La Regional, ha transportado a millones de viajeros de un punto a otra de la capital. El Ayuntamiento ya se ha puesto manos a la obra para diseñar el nuevo acuerdo en el que priorizará la mejora del servicio, haciendo especial hincapié en que se cumplan los horarios y se llegue a aquellas zonas de la ciudad que más se han desarrollado.
La Palencia de hoy no es la de 2014. Si entonces el objetivo del pliego que lanzó el Ayuntamiento se centró en la modernización tecnológica del servicio, conservando el mismo número de líneas que en el anterior contrato y atendiendo a las demandas vecinales, ahora el Consistorio tiene un reto mayor.
En esta década, la ciudad se ha desarrollado urbanísticamente en dos zonas muy concretas: La Lanera, en el barrio del Carmen; y, ya en pleno auge, el Sector 3, es decir, la zona comprendida entre Los Tres Pasos y La Miranda. Dos bolsas poblacionales a las que el Ayuntamiento quiere llevar al autobús urbano.
También han surgido nuevas necesidades que es necesario atender. Muchas de las familias que se mudaron al barrio de la Nueva Balastera hace una década o antes, tienen hoy hijos próximos a la edad universitaria. Sin embargo, esta parte de la ciudad no está conectada con el campus universitario de la Yutera. Ocurre lo mismo con dos centros de empleo importantes, Hermanas Hospitalarias y San Juan de Dios; anteriores corporaciones introdujeron modificaciones en el contrato para dar servicio a estas dos zonas de la ciudad pero un Juzgado tiró abajo la ampliación de los horarios y las líneas que propuso el Consistorio.
El equipo de Gobierno de Miriam Andrés entiende que es necesario prestar este servicio, por lo que el nuevo contrato garantizará que el aubotús urbano llegue a estos dos centros de trabajo y atienda las nuevas realidades sociales de la ciudad.
Además, el Consistorio quiere acabar de una vez por todas con los incumplimientos en los horarios porque está convencido de que no hay mejor forma de incentivar esta forma de movilidad que los ciudadanos sepan a qué hora pasará el autobús por su parada y que se cumpla esa previsión.
Adaptar el servicio a estas necesidades, licitar el nuevo contrato y adjudicarlo va a llevar meses por lo que Palbús continuará al frente, al menos, durante todo este año. No obstante, el Ayuntamiento ya está trabajando en esa replanificación y no se descarta que recurran a ayuda externa para elaborar un sistema de líneas que, muy probablemente, depare cambios de calado frente al actual.
Uno de los billetes más baratos de España
El precio del billete sencillo de autobús urbano en la capital cuesta 0,93 euros y es uno de los más económicos de España. Concretamente, es el cuarto más barato por detrás de Lugo, Ourense, Mérida y Ceuta, según un informe elaborado por Facua. A esto hay que sumar que el Ayuntamiento ofrece la posibilidad de adquirir un bonobús que, gracias al descuento aplicado de manera excepcional por el Gobierno hasta el 31 de diciembre, hace posible que el precio por viaje se reduzca de 0,67 a 0,33 euros en el caso del bonobús normal; de 0,20 a 0,10 euros para jóvenes, familias numerosas y desempleados; y de 0,20 a 0,10 euros para viajeros de la Tercera Edad o con discapacidad. Estos precios, sin embargo, no permiten cubrir el coste real del servicio, por lo que el Ayuntamiento deberá pagar a la empresa 2.380.000 euros este año.
* La información se ha actualizado con los precios en vigor a día de hoy