La Escuela Universitaria de Enfermería Dacio Crespo afronta la recta final de sus obras de rehabilitación, que ya están ejecutadas al 74 por ciento. Será esta primavera cuando se den por finalizados los trabajos de modernización de este inmueble propiedad de la Diputación, de los que se encarga la empresa Acciona Construcción durante un plazo de dieciocho meses y un presupuesto de 7,1 millones de euros, de los que ya se han ejecutado 5.307.784 euros.

Un año después de que dieran comienzo las referidas operaciones (19 de enero de 2024), el edificio da ya algunas pistas de cuál será el resultado final de la intervención, gracias en parte también a la cofinanciación de la Junta de Castilla y León, que aporta 2,2 millones de euros a través de los Fondos de Transición Justa de la Unión Europea.

 El primero y más espectacular a simple vista es el nuevo acceso desde el lugar que antaño ocupó la antigua imprenta provincial, cuyos talleres, en los que durante décadas se imprimió el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) hasta su desaparición en formato físico, se transformarán en despachos al servicio del personal docente.

Una vez en el patio (que se pondrá al servicio del alumnado para sus momentos de ocio entre las clases y los exámenes) es donde uno se encuentra con algunos de los cambios más significativos. A simple vista, destaca el nuevo volumen central de comunicación vertical entre las tres plantas de la edificación, que servirá al mismo tiempo para aprovechar al máximo la luz natural gracias a los enormes ventanales con los que estará rematado.

A ambos lados se levantan dos de los elementos diferenciadores de la intervención: dos módulos de escaleras exentas (uno a cada lado) y al aire libre cuya construcción ha entrañado un gran desafío arquitectónico. Y es que consta de una losa de grandes dimensiones y un sistema constructivo complejo con un andamiaje que va subiendo poco a poco, y un hormigón blanco visto «muy complicado de trabajar» durante el encofrado para conseguir un óptimo resultado final.

La presidenta de la institución provincial, Ángeles Armisén, cursó ayer una visita oficial a las instalaciones, de las que destacó la «transformación total» de Enfermería. «Se va a convertir en un edificio moderno de este siglo, abierto, con nuevos espacios en el exterior y volúmenes», aseguró. 

«Va a ser un compromiso hecho realidad en los próximos meses, con la voluntad de que los primeros alumnos completen sus estudios en estas instalaciones en el curso 2025/26», añadió durante el recorrido, en el que estuvo arropada por la vicepresidenta primera, María José de la Fuente; el diputado de Servicios Sociales, Juan Antonio Obispo;el director de la Escuela de Enfermería, José Antonio Iglesias; y el arquitecto de la Diputación, José Antonio González. «Hemos intervenido en zonas puntuales con un lenguaje actual», apuntó este último.

EL INTERIOR, MUY AVANZADO

Una vez en el interior, ya se han completado las tareas de demolición, cimentación, saneamiento y estructura como la ejecución de revestimientos interiores y exteriores y la ejecución de falsos techos. También se ha colocado un importante número de carpinterías exteriores y se ha iniciado la ejecución de solados. 

Por otro lado, las conducciones de un gran número de instalaciones están ejecutadas, mientras que están pendientes los acabados, la carpintería interior, la instalación del grupo electrógeno, centro transformación y la urbanización exterior, que incluirá amplias zonas verdes y un aparcamiento anexo al servicio de los estudiantes.

La más avanzada es la última planta, donde ya se ha colocado la tarima flotante de la biblioteca, en la que ya se ha elegido el lugar donde se ubicarán los diferentes escritorios, pues todo el sistema de iluminación y electricidad parte del suelo para mejorar la funcionalidad y estética de la sala. Un espacio que cumplirá su doble función de zona de estudio e investigación, «fundamental para un complejo de estas características y necesario para la capital y esa zona sur de la ciudad».

También se pueden ver detalles como los falsos techos rematados con láminas de aluminio que, además de funcionales para ocultar todo el cableado y conductos, confiere un resultado muy estético y diferenciador a los pasillos en los que ya se ha instalado.

Diario Palentino recorrió ayer    (como lo harán los alumnos a partir del próximo mes de septiembre, cuando se espera su regreso) las tres alturas de un inmueble que comienza a tomar forma y que está cada vez más cerca de ser la instalación «moderna, eficiente, accesible, sostenible y segura» que persigue la institución con la obra, una de las grandes apuestas del presente mandato y con la que se garantizará la permanencia en Palencia del Centro Territorial de la Universidad de Educación Nacional a Distancia.

En total, casi 4.000 metros cuadrados al servicio de la comunidad universitaria en un edificio que mejorará sustancialmente la eficiencia energética, con un ahorro estimado del 57 por ciento. Para conseguirlo, la nueva carpintería está dotada de un sistema de rotura térmica, se ha mejorado el sistema eléctrico y se han modernizado la fontanería, la seguridad e incluso la telecomunicación y la informática.
Una vez finalizadas las obras, llegará el turno de la equipación. Parte del mobiliario se estrenará, pero también se reutilizará el material adquirido recientemente, que entre tanto está debidamente almacenado en instalaciones de la institución provincial.

400 ALUMNOS

La Dacio Crespo es el cuarto centro universitario más demandando del distrito de Valladolid. Este curso cuenta con una matrícula de más de 400 alumnos, y la plantilla del profesorado está formada por 27 docentes. Originariamente, el edificio fue concebido en 1948 como un proyecto de beneficencia para, posteriormente, transformarse en un hogar infantil. 

Por su parte, la UNED suma más de 2.000 alumnos, unos 75 tutores docentes, 28 grados, 24 microtítulos, 241 másteres oficiales, 86 cursos de idiomas y permite también el acceso a la universidad a mayores de 25 y 45 años. Se trata, por tanto, de una institución docente «consolidada y de gran importancia para la provincia y la comunidad educativa de Castilla y León», subrayó Armisén.

Para poder continuar con la actividad académica de la Escuela de Enfermería,  se aprobó un convenio de colaboración con la UNED por importe de 173.000 euros para hacer posible que los alumnos de Enfermería puedan cursar sus estudios en el centro de la institución educativa de la calle La Puebla de la capital. Además, la institución provincial aportó otros 120.000 euros para adecuar el edificio a las enseñanzas de la Escuela de Enfermería.  
La creación de este centro universitario forma parte del compromiso al que llegó la Diputación con el Ayuntamiento de la capital como solución a la controversia de la calle Jardines y por el que parte de los fondos que ha tenido que reintegrar el Consistorio de la institución provincial en virtud de la sentencia judicial tenían como destino dicho proyecto.