Regreso a la casilla de salida pero con consenso en lo principal. Esa sería la conclusión extraída de la comisión de Tráfico y Seguridad Ciudadana celebrada ayer, en la que se debatió y dictaminó favorablemente la ordenanza que regulará el funcionamiento de las terrazas covid. Contó con en el apoyo del equipo de Gobierno que forman Cs -cuya edil Carolina Gómez impulsó el texto- y PP. La portavoz de Vox, Sonia Lalanda, se abstuvo en la sesión y se reservó el voto para el pleno, que en principio señaló que será favorable, «con algunas matizaciones vía enmienda dado que el covid, que ya debe ser un concepto superado parar la terrazas, ha puesto sobre la mesa una serie de cambios y hábitos en la gente, que hace más vida social en la calle», expuso. Mientras tanto, PSOE y Ganemos siguen en desacuerdo y votaron en contra.
En el anterior pleno del 19 de enero el equipo de Gobierno del Ayuntamiento no logró sacarla adelante. El motivo fue que le faltó un voto -el de la edil del PP Ángeles Armisén, ausente en el pleno- preciso para sumarlo al de calidad del alcalde de Cs, Mario Simón. El texto no se aprobó con el voto en contra del PSOE y Ganemos, junto a la abstención de Vox, lo que evitó un empate y la votación quedó 12 a 11. Ahora se ha retocado la ordenanza y se vuelve a llevar al pleno ordinario del jueves para intentar su aprobación.
La principal novedad de la ordenanza pasa por legalizar las llamadas terrazas covid, por lo que los establecimientos podrían tenerlas con mesas y sillas -frente o junto a su establecimiento- si cumplen las condiciones urbanísticas y de tránsito. La nueva normativa afectará actualmente a 114 terrazas.
Desde la oposición se señaló en la comisión de Tráfico celebrada en enero y en la de ayer que el texto para modificar la actual ordenanza de terrazas presentado no regulaba bien la celebración de conciertos, horas de funcionamiento y el servicio que debe prestarse en las mismas. Mientras tanto, el equipo de Gobierno dijo que se trataba de una medida que favorece a la hostelería y al comercio y, además, fija empleo en la ciudad.
Ahora, y después de lo debatido en la comisión de ayer, el PP apoya a Cs para sacar adelante la ordenanza, Vox parece dispuesto a sumarse y PSOE y Ganemos, si no cambian la posición que mantienen, están en contra de aprobar la ordenanza.
Sonia Lalanda explicó ayer que el documento presentado es distinto a los anteriores. «Es una ordenanza nueva y el planteamiento que tiene es distinto y vamos a estar entre la abstención y el voto afirmativo. La vemos bien siempre y cuando se genere actividad económica y dé vida a la ciudad, algo en lo que estamos de acuerdo. Esto, por supuesto, hay que compatibilizarlo con el interés de los vecinos en el caso de evitar molestias, guardar una estética en la instalación hostelera -que creemos se controla adecuadamente- y en el aspecto relativo al aparcamiento. En el caso de los horarios -que son máximos y no mínimos en fin de semana y vísperas de festivos regulados por la Junta de Castilla y León- son los permitidos según la actividad que puede desarrollar cada establecimiento en función de la licencia administrativa otorgada. Hay que buscar un equilibrio entre todo y, pese a que resulte complicado, entendemos que es lo que hay que hacer. Si al del bar y al del restaurante le van bien, que la economía se mueva y que al de la tienda de al lado le beneficie igualmente», arguyó.
CUMPLIMIENTO ESTRICTO. Otro aspecto importante será el del cumplimiento estricto de la normativa. Después de publicarse la orden los establecimientos con terrazas exteriores tendrán un plazo de un mes para adecuarlas y quien no cumpla tendrá que desmontarla. También se ha incluido en el texto el número mínimo de días que tiene que estar montada y en pleno funcionamiento una terraza es de 20 al mes, excepto en los períodos vacacionales para los propietarios, donde las jornadas quedan fijadas en 15.
«La ordenanza reguladora tiene que salir adelante, ya que tenerla paralizada no conduce a nada, salvo a tener tablaos flamencos rodeados de palés de madera. Tampoco es bueno para los vecinos, dado que hay un número de plazas de aparcamiento ocupadas ilegalmente. Además, habrá gente que no quiera seguir con una terraza, teniendo en cuenta que en octubre empieza a hacer frío en Palencia y que continúa hasta marzo, dado que hay que garantizar que funcione como mínimo 20 días al mes», sentenció Sonia Lalanda.
Por su parte, el portavoz popular y primer teniente de alcalde, Alfonso Polanco, explicó que ha logrado el compromiso del alcalde por Cs, Mario Simón, como responsable de la Policía Local, para que, una vez publicada la ordenanza, se dé un plazo de un mes destinado a aquellos hosteleros que decidan no mantener estos espacios los desmantelen y que, en caso de no hacerlo, sea el propio Ayuntamiento el que lo lleve a cabo y obligue a cumplir la ordenanza, además de cargar los coste económicos que ello suponga al infractor. «Lo que se hace es sacar una ordenanza nueva que ponga fin a terrazas instaladas durante la pandemia que no son necesarias y autorizar aquellas que están dando buen resultado para la ciudad», apuntó. Además, el edil popular consideró que la nueva ordenanza de instalación de terrazas en la vía pública garantiza los derechos de los sectores afectados. «Se dan garantías tanto a los hosteleros que han invertido una cantidad importante en sus negocios como a los vecinos y sus derechos a la hora respetar su descanso», explicó.
CONCEJAL DE TRÁFICo. Por su parte, la concejal de Tráfico por Cs, Carolina Gómez, señaló que se han aceptado varias propuestas. «El texto de la anterior ordenanza ha sido renovado íntegramente y se ha adaptado a la situación. Hemos aceptado que se mantenga en las terrazas un ornato adecuado y que se prescinda totalmente de los palés», manifestó.
Además, en el caso de los horarios que marca la Junta, la edil de Cs, aseveró que consultó al respecto con la secetaría general municipal. «Son los que están en vigor según la actividad de cada tipo de negocio y su licencia», dijo. Se aceptó, además, la propuesta de adaptarse a aquellas actividades culturales como conciertos y gastronómicas, cuyos ruidos procedentes de altavoces puedan causar molestias a los vecinos, además de marcar en este sentido algunas restricciones especiales.
«Todo está regulado en la ordenanza. De octubre marzo deben concluir a las 10 de la noche y de marzo a octubre a las 12 de la noche», precisó. Sobre el socio de Gobierno, el PP, Carolina Gómez concretó que «ha participado de forma activa en la elaboración del texto hasta de madrugada para ultimar todos los aspectos a intercambiando correos antes de llevarla a la comisión informativa de Tráfico».