Mucho ha llovido ya en el mundo y también por estos lares más próximos, desde que allá en el año 1975 -según la mayoría de los analistas- las Naciones Unidas (ONU) comenzasen a celebrar el Día Internacional de la Mujer el 8 de marzo; con origen en las manifestaciones de las mujeres que a principios del siglo XX reclamaban el derecho al voto, unas mejores condiciones en la conocida como brecha laboral y la igualdad entre los sexos. Y, desde entonces, no ha parado su lucha año tras año, en pos de lograr una igualdad real de género en cuanto a derechos y libertades. Nuestra capital y nuestra provincia no han permanecido ociosas y también lo han hecho así a través de una serie de actos organizados por las diferentes instituciones, celebrando también este día, como lo vienen haciendo regularmente año tras año, tratando de dar un paso más en pos de la conquista de una igualdad real entre hombres y mujeres en el día a día de sus vidas. Y es que, a pesar de las conquistas de las últimas décadas en este sentido, qué duda cabe que todavía no han llegado a igualarse los derechos de las mujeres a los de los hombres en muchos ámbitos. Y de ahí que este día tenga que seguir siendo necesario; para ver si entre todos logramos erradicar de forma definitiva esa discriminación contra las mujeres en la esfera pública y privada; unida a esa violencia en el hogar hacia la mujer por el simple hecho de ser eso, mujer. En algunos casos, con finales trágicos muy deplorables. Así las cosas y tratando de concienciar a la ciudadanía, hemos podido asistir aquí en nuestro espacio ciudadano más próximo, a una multiplicidad de actos, que han ido desde una mesa redonda con mujeres emprendedoras palentinas que aportaron sus diferentes experiencias en el ámbito laboral hasta lograr como mujer su situación profesional; pasando por el acto central del 8M con la lectura del manifiesto de la Plataforma, hasta llegar al final del día con la gran manifestación reivindicativa de los derechos de las mujeres en el ámbito laboral, salarial o profesional, entre otros. Porque, madre, abuela, hija, hermana, prima, tía, amiga…, pero sobre todo, mujer.