Suelen decir que poco dura la alegría en la casa del pobre. Después de varios días sin conocer (al menos oficialmente nadie ha dicho nada) de delitos relacionados con el patrimonio, Diario Palentino pudo conocer que los ladrones han regresado a la capital, desvalijando cuatro viviendas en la jornada del martes.
Según las fuentes consultadas, dos viviendas fueron violentadas en el número 16 de la avenida de Valladolid. Al parecer, en una de ellas el botín no debió ser muy apetitoso para los delincuentes, mientras que en la otra se llevaron algunas joyas, además de provocar daños y desperfectos.
Los dos asaltos se cometieron en la calle María de Padilla y en General Amor, desconociéndose en esta ocasión el botín logrado. Por lo demás, a estos cuatro asaltos hay que añadir otro que se produjo el pasado fin de semana en una nave de la calle Villadiego de la localidad de Pomar de Valdivia.
Por lo demás, Diario Palentino ha sabido de fuentes de la investigación que un grupo de ladrones ha venido actuando en los últimos tiempos en la capital vallisoletana y, por lo tanto, se sospecha que este grupo supuestamente está implicado en los últimos robos cometidos en Palencia, robos que, como siempre, tienen como objetivo lograr joyas y dinero.
EN TRES MESES. El pasado 29 de mayo este periódico ya informó que la Policía Nacional investigaba la comisión de dos robos en domicilios denunciados en aquellos días. Los amigos de lo ajeno habían entrado en sendas viviendas ubicadas en la avenida de Simón Nieto y en la calle de Los Álamos, respectivamente.
Una semana antes (probablemente el mismo grupo de delincuentes) habían entrado en dos viviendas de un mismo portal en la calle San Antonio y luego en otro en la calle Los Abetos. En el primer domicilio de los dos robados en la calle San Antonio faltaban diversos enseres, sin poder determinar todo lo sustraído, y en el otro desaparecieron varias joyas.
Los ladrones forzaron las cerraduras, tanto de la puerta del portal principal como las de los pisos desvalijados. En ambos casos las cerraduras violentadas se abren con llave de puntos, la mal llamada de seguridad, y en lugar de usar la técnica conocida como bumping, topolino y presión, los autores de los robos los cometieron con un extractor y arrancaron todo de cuajo.
Además, la Policía Nacional investigaba, además, otras dos sustracciones en un mismo portal de la calle Francisco Pizarro un día después de los tres perpetrados en San Juanillo y San Antonio. De un piso se llevaron joyas y un reloj y del otro en principio solo diez euros.
OCHO EN ABRIL. Tampoco conviene olvidar que a finales de marzo y comienzos de abril, según los datos que pudo recabar Diario Palentino, al menos ocho viviendas ubicadas en las calles Juan de Balmaseda (barrio del Campo de la Juventud), Huerta de Guadián y plaza de la Inmaculada fueron asaltadas por los ladrones y otro medio centenar de pisos situados en las mismas zonas fueron marcados por los ladrones con pegamento para indicar a sus compinches de que podían convertirse en posibles objetivos.
En resumen, con independencia de lo que luego digan las estadísticas del Ministerio del Interior, desde finales de marzo hasta ayer mismo se han consumado o intentado en algunos casos un total de 19 robos en otros tantos pisos de la capital ubicados en diferentes puntos, una cifra nada desdeñable, teniendo en cuenta que podría haber más puesto que oficialmente no se ha dado a conocer estos hechos.