La prórroga de las medidas del 'escudo social' por parte del Gobierno de España en materia tributaria, como el IVA de los alimentos y la electricidad y sus impuestos vinculados, tendrá un impacto de 190 millones en la recaudación de Castilla y León en los seis meses de vigencia de estas propuestas. Una cuantía de la que 109 millones dejarán de ingresarse en las arcas de la Junta de Castilla y León, es decir, dos terceras partes del total, y otros 81 millones de euros en las del Gobierno central. Hecho ante el que el portavoz autonómico y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, volvió a reiterar ayer su crítica al Ejecutivo central por no consultar con las comunidades unas medidas que tendrán impacto en su recaudación.
El portavoz se refirió así a las medidas sobre el IVA de los alimentos y de la luz y ha insistido en que estas medidas tienen consecuencias directas sobre las cuentas de las autonomías, ya que la mitad de la recaudación del IVA corresponde a las mismas, mientras que les afecta la totalidad de los impuestos especiales de la electricidad, algo que se transfirió para financiar servicios públicos. «Hubiera sido bueno contar con quienes vamos a hacer la mayor aportación de estas medidas, con quienes vamos a pagar y contribuir con sus recursos a estas medidas, no se nos ha querido contar, no se nos ha querido informar, se tomó una decisión en el último día prácticamente hábil a estos efectos y con una cierta improvisación».
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno en la que trasladó la cantidad estimada de impacto en la recaudación tributaria autonómica, Carlos Fernández Carriedo resumió que desde el año 2021 en que se habilitaron estas ayudas ha supuesto un coste e 900 millones, 600 serían para la Junta y 300 en el caso del Gobierno. Todo ello después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciase este miércoles la extensión de la supresión del cero por ciento del IVA durante los primeros seis meses del año 2024 a los alimentos básicos, y la retirada de las bajadas de impuestos vinculadas con la electricidad y el gas, de manera que se sube del 5 al 10% el IVA de la electricidad y los impuestos sobre el valor de la producción eléctrica y especial de electricidad, informa Ical.
Tras reiterar que el 50 por ciento del IVA que se recauda corresponde a las comunidades, el portavoz de la Junta incidió en que el Gobierno aprueba medidas no solo sin contar con las autonomías, sino que éstas tienen que ejecutar las medidas y aportan a las mismas más de su recaudación. En cuanto a las ayudas al transporte, el portavoz garantizó la aportación de la Junta, un punto en el que señaló que además es el Ejecutivo regional el que «anticipa» las cuantías del Gobierno. «Vamos a continuar con programas de apoyo al transporte público y anticipando fondos del Estado que, a día de hoy, no ha pagado», sostuvo, tras lo que lamentó que Bildu «parece el portavoz del Gobierno».