Los paredeños pudieron, tras dos días, abrir un grifo de su casa para llenar un vaso de agua, bebérselo y calmar su sed.El líquido que llega a sus viviendas a través de la red de abastecimiento volvió ayer a ser potable. Ya no hay restricciones. «Los últimos análisis realizados han ofrecido unos parámetros que se encuentran dentro de los rangos establecidos en el Real Decreto 3/2023, de 10 de enero, por el que se establecen los criterios técnico-sanitarios de la calidad del agua de consumo, su control y suministro», aseguraron desde el Ayuntamiento de la villa a través de un aviso firmado por el alcalde, Luis Antonio Calderón.
Con este anuncio se restituye en Paredes de Nava la normalidad que se perdió el miércoles, cuando Sanidad prohibió el uso del agua para beber y cocinar porque se encontró un valor paramétrico por encima de los límites permitidos. Según informó el delegado de la Junta de Castilla y León en Palencia, José Antonio Rubio Mielgo, este problema estuvo provocado por la suma de diversos factores que provocaron una mayor concentración de cloro.
Durante las jornadas que se aplicaron las prohibiciones en tierras paredeñas, los vecinos pudieron abastecerse de agua potable gracias a un camión cisterna que estuvo aparcado de 18 a 21 horas en la zona de estacionamiento para autobuses situado frente al colegio Alonso Berruguete. El único requisito que pedía el Consistorio a los vecinos era que llevaran envases o recipientes.
Además de la localidad terracampina, hubo al menos otros dos municipios de la provincia afectados por este hecho en los últimos días, Torquemada y Tariego de Cerrato. En el primer caso, la prohibición se estableció el 30 de junio al comprobarse la presencia en el agua de un contaminante que superaba ligeramente los valores normativos, provocado como reacción al proceso de potabilización de una mayor conductividad presente en el agua bruta procedente del río Pisuerga. En la localidad tarequense, la medida se empezó a aplicar el lunes. Tanto en un lugar como en otro, se anunció el jueves que el agua volvía a ser apta para el consumo humano. Al igual que enParedes, pudieron usar el líquido para fregar o ducharse.