Dice el refrán que A río revuelto, ganancia de pescadores. Y en el PP parecen tenerlo bastante claro. La dirección nacional de la formación está convencida de que la amenaza de Vox de tumbar los presupuestos autonómicos en las regiones gobernadas por el PP puede incluso reforzar a los populares en esos territorios. Para apoyar este argumento, se remontan a lo que ocurrió en Madrid con Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida, que cosecharon mayoría absoluta en mayo de 2023 tras el «no» del partido ultraconservador a apoyar las cuentas regionales y municipales.
El pasado mes de julio, los de la capitalina calle Bambú cumplieron su órdago y rompieron los pactos de gobierno que habían alcanzado con el PP en cinco Ejecutivos autonómicos (Comunidad Valenciana, Aragón, Castilla y León, Extremadura y Murcia), al tiempo que retiraron su apoyo parlamentario al Govern de Baleares. El motivo que alegó fue la decisión del partido de Feijóo de aceptar el reparto de 347 menores migrantes.
Este mes de diciembre, apenas cinco meses después, la formación de Abascal ha reabierto su batalla con los populares por el «acercamiento» al PSOE en migración y ha anunciado la suspensión de las negociaciones presupuestarias con Génova en las regiones donde su apoyo es clave para sacar las Cuentas.
Por el momento no se ha producido ningún acuerdo entre el Ejecutivo y el PP para la reforma de la Ley de Extranjería relativo al reparto de menores migrantes. La reunión de dos horas que hace unos días mantuvieron el ministro Ángel Víctor Torres y el portavoz del Grupo Popular, Miguel Tellado, -junto a los presidentes de Canarias y de las dos ciudades autónomas de Ceuta y Melilla- se saldó sin ningún acuerdo y sin visos de que vaya a haberlo en el corto plazo.
Por eso, en la formación de centro-derecha creen que Vox lo que ha decidido es abrir una estrategia de oposición frontal a ellos buscando réditos electorales, ya que, según recalcan, el pretexto que utilizaron con esta cuestión para suspender las negociaciones presupuestarias no se ha cumplido.
Como ejemplo de ese plan electoral, fuentes del equipo de Feijóo citan también lo ocurrido recientemente en Baleares, donde la popular Marga Prohens decidió retirar los Presupuestos autonómicos al no tener los apoyos suficientes tras la ruptura con los de Abascal.
«Primero utilizaron la excusa del pacto migratorio. Ahora la lengua, después será otra cosa», sostienen las mismas fuentes, que creen que «están buscando excusas y complicando la gobernabilidad».
Por lo tanto, el PP considera que hay una «vocación» de la cúpula de Vox de «entorpecer» los Ejecutivos autonómicos, pero ya avisan que esa estrategia le puede salir mal a los de Abascal porque su electorado no quiere comicios. «No creo que sus votantes pidan elecciones otra vez para dar una oportunidad a la izquierda», aseguran.
Es más, en el cuartel general de los populares creen que la amenaza puede convertirse en una especie de «regalo» porque, en el medio plazo, puede contribuir a que los de Génova se refuercen en las zonas a las que ahora amenazan con tumbar presupuestos.
«Ya pasó en Madrid con Ayuso. Eso los ciudadanos lo ven», advierten, recordando que en esta Comunidad Rocío Monasterio decidió tumbar los Presupuestos para 2023 de la líder popular y que lo mismo hizo en el Ayuntamiento de la capital el portavoz de Vox, Javier Ortega Smith.
Pocos meses después, en las autonómicas y municipales de mayo, ambos cosecharon mayoría absoluta, creciendo a costa de su antiguo aliado. «Vox se equivoca de estrategia porque el PP puede crecer», advierten fuentes de la dirección nacional del Partido Popular con la vista puesta en esos territorios.
El líder de la oposición ya dejó claro que su formación va a seguir «defendiendo sus principios y sus convicciones» y no se va a someter a «chantajes de ningún tipo». En parecidos términos se pronunció la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, avisando a Vox que con el partido de Génova «las amenazas y presiones no funcionan» y que deberá explicar «a los ciudadanos que les votaron» por qué les deja sin Presupuestos.
Valencia, caso aparte
En cualquier caso, y pese a la amenazas, las negociaciones en esta materia sí que han continuado su curso en algunas regiones. Así, en el caso concreto de la Comunidad Valenciana, se prevé que Carlos Mazón presente unas Cuentas centradas en la reconstrucción tras la dana y los de Vox podrían apoyarlas, admiten fuentes del partido de Abascal, que ya respaldaron las cuentas en Valencia ciudad y en la Diputación.
De la misma manera, precisan que las negociaciones están también encarriladas en Aragón. Sin embargo, este partido reconoce que existen algunos escollos que son insalvables en zonas como en Castilla y León, Baleares, Extremadura y Murcia, como son las subvenciones a los sindicatos, la política lingüística o la derogación de la Ley de Memoria Histórica.