La cuadragésima segunda edición de la Marcha Adecas apunta a histórica por la gran participación. Según los primeros cálculos de la organización, que recae en la Fundación Personas, unas 700 andarines hicieron ayer, bien andando o bien corriendo, los 16 kilómetros que separan el punto de salida, Otero de Guardo, del lugar de llegada, la plaza guardense de la Constitución. «Estamos contentísimos. Hemos superado con creces las expectativas y ayer hicimos muchas inscripciones físicas», aseguró feliz la delegada de la entidad promotora,Laura Rojo. No es para menos, ya que la idea inicial era alcanzar los 600 andarines y atletas, según explicaron en la presentación de la cita solidaria.
En esta ocasión, el noroeste de la provincia se tiñó de amarillo, color de las camisetas de los participantes en la marcha, que formaron la habitual hilera de personas por lugares de extraordinaria belleza como el mirador de Compuerto o Velilla del RíoCarrión. Además, el tiempo acompañó, de ahí que fuera mucho más cómodo recorrer todo el itinerario, que se endulzó en Otero de Guardo con una chocolatada elaborada por las mujeres de la localidad. «Al principio estaba nublado, pero la temperatura era muy buena. Luego salió el sol, aunque no nos apretó mucho», manifestó Rojo, que, una vez más, quiso agradecer la solidaridad de los participantes, los voluntarios, las instituciones,Guardia Civil, Cruz Roja, los Ayuntamientos de Guardo,Velilla y Santibáñez de la Peña, las familias que forman parte de Adecas y todas las empresas que aportaron su granito de arena para que esta veterana actividad se volviera a celebrar un año más.
«Hay grandes marcas colaboradoras y pequeñas empresas que hacen un esfuerzo para apoyar causas solidarias», declaró la delegada guardense de FundaciónPersonas, que tampoco se olvidó de los usuarios, «que son los protagonistas». En este punto, destacó que gracias al grupo Montaña Palentina Inclusivo dos personas con discapacidad pudieron participar en la marcha montadas en joëlette (una silla de ruedas todoterreno monorueda).
Tras la actividad física se realizó por primera vez una rifa con 36 lotes y que también dejó un gran sabor de boca en la organización. «Tuvo mucho éxito. Prácticamente vendimos todas las papeletas, que costaban un euro», apuntóRojo. Además, aquellos que aún tenían fuerzas para seguir moviéndose pudieron bailar al ritmo de la música del dj, que puso el broche de oro a la jornada que ya está más que afianzada en el calendario solidario de la comarca guardense y que contó con un puesto de venta de productos que se elaboran en el taller ocupacional.
«Los caminantes año tras año nos apoyan y ayer recibieron una cuña de queso, una botella de agua, unas pastas y un bollo preñao», añadió.
Aún se desconoce la cifra final que la organización logró recaudar con los donativos de los participantes, pero confían en que se supere la cifra de la edición de 2023, que ascendió a unos 10.000 euros. Como sucedió en ocasiones anteriores, lo que sí se sabe es en qué se invertirá el dinero donado en la marcha: en sufragar los gastos de la adquisición de ayudas técnicas (dos grúas -una de bipedestación y otra de posición sedente- y un carro y una silla de ducha) para usuarios con necesidades especiales de apoyo que se instalarán en la nueva vivienda tutelada de la entidad.