Hay una edad en la que ni se es niño, ni se es joven, son unos años intermedios en los que las colchonetas empiezan a ser terreno de los hermanos pequeños y las altas horas de la madrugada son horas inapropiadas. Es entonces cuando las fiestas se empiezan a vivir de otra forma y se descubre que los cabezudos son jóvenes cargados con pesadas caretas que les impiden correr con facilidad.
Alejandro Vela Terceño y Mireia Martín Sudaria, serán el caballero y la dama de fiestas de Saldaña este año. El primero tiene doce años y la segunda «once para doce», ya que este año aún no ha celebrado su cumpleaños.
En esa edad, en la que los granos están próximos a manchar la cara de los niños, es en la que se encuentran ambos, la adolescencia aún no ha llegado, pero la niñez toca a su fin. Sin actividades claras y específicas para ellos, disfrutan de las fiestas como los que más, repartiendo sus fuerzas en actividades tanto de niños, como de jóvenes. «Me gustan todos los festejos», señala Alejandro Vela.
Alejandro Vela Terceño, caballero de fiestas de Saldaña. - Foto: Carlos Valcarce Mireia sabe que el evento más destacado de las fiestas es la Romería y dice que es lo que con más ansia espera. Sin embargo, lo que más le gusta son «los cabezudos y el parque infantil». En todos los eventos programados por el Ayuntamiento y del que disfrutarán los saldañeses, estos dos niños representarán a la infancia y a la juventud de la villa con la entereza que muchas veces solo se supone a los adultos. «Ahora los niños nos sacan a todos un punto, Mireia está afrontando el ser dama de fiestas con una solidez increíble», dice el padre de la chica.
«Animado y decidido», así dice estar Alejandro para afrontar el reto, que aceptó en cuanto se lo propuso su padre, quien dice que es tal el aplomo con el que su hijo espera el día de mañana que «ni siquiera pregunta». Tanto la dama como el caballero han vivido las fiestas de Saldaña, en anteriores ocasiones, de tal forma que la tienen interiorizada. Mireia dice estar «tranquila pero nerviosa».
«El día en el que se hizo el sorteo para decidir quién era la dama de las fiestas estuve presente con mi hija, cuando dijeron su nombre se puso más blanca que la pared, no se lo esperaba», relata el padre de la dama y continúa, «está encantada, como lo estaría cualquier niña, les encanta que las saquen fotos y las agasajen».
Alejandro, a su modo, también disfrutará de su posición. A Alejandro le gustan los toros y como caballero de fiestas los verá desde una posición privilegiada. Parte con ventaja en este acto el niño, ya que Mireia será la primera vez que acuda a ver un espectáculo taurino de este tipo. «La he explicado que es algo sangriento y que si no quiere, no tiene que ir», comenta el padre de la niña.
Sin embargo, el ser dama de fiestas no es solo un premio, también un deber y Mireia acudirá con todos a la plaza a disfrutar de los novillos y caballos en el festival taurino del próximo domingo. Por encima del caballero y la dama, estos días solo queda Saldaña y sus fiestas patronales en honor a la Virgen del Valle.