Las heridas crónicas, complejas o de difícil cicatrización son una realidad cotidiana y la atención sanitaria a las personas que las sufren cada día se ha convertido en un desafío para los sistemas de salud de todo el mundo. Se calcula que las úlceras por presión (UPP) afectan al 7% de los pacientes hospitalizados, al 9% de los que acuden a su centro de salud y hasta el 12% de los pacientes institucionalizados.
Con el objetivo de reflexionar y debatir sobre cómo contribuir a que se traten de una manera más eficaz y procurar su prevención, más de un centenar de profesionales sanitarios de toda la Comunidad se dio cita el viernes en la I Jornada de Comisiones de Heridas de Castilla y León, organizada por la Comisión de Heridas del Área de Salud de Palencia con aforo completo del salón de actos del hospital Río Carrión.
«Las heridas crónicas no son inherentes a determinados procesos patológicos, ni a la edad, ni están ligadas a los procesos del final de la vida. Son lo cotidiano y para nosotros, como profesionales sanitarios, es nuestra obligación abordar su complejidad. Las heridas tienen que ser el último escalón a donde tiene que llegar el paciente y la clave está en el cuidado, la prevención, la educación y en mantener una actitud proactiva», señaló el gerente de Asistencia Sanitaria de Palencia, José Jolín, durante la inauguración del encuentro regional, quien quiso recordar que según la OMS el 95% de las úlceras por presión son prevenibles.
Las heridas tienen un impacto significativo en la salud y calidad de vida de los pacientes afectados y su entorno familiar, dado que no son sólo causan de dolor, sino también ansiedad, miedo, depresión o vergüenza. «Cada herida es única y requiere una evaluación individualizada, no existe un enfoque único que sirva para todas. Es esencial que recordemos que detrás de cada herida hay una persona, que a menudo está pasando por un momento de dolor, miedo y vulnerabilidad», mantiene Jolín.
EMPATÍA Y ATENCIÓN. «El cuidado de las heridas es más que solo ciencia, es también empatía, compasión y atención a las necesidades de los pacientes», consideró Marta Sánchez, presidenta de la Comisión de Heridas del Área de Salud de Palencia y enfermera supervisora del servicio de Medicina Interna del Hospital San Telmo. «Recordemos que cada acción que tomamos en el campo de la salud tiene un impacto directo en la calidad de las vidas de las personas», añadió.
La importancia de la prevención fue objeto de reflexión durante el encuentro en el que los asistentes coincidieron en señalar que es una parte fundamental de su responsabilidad como profesionales de la salud, ya que a menudo es la clave para evitar situaciones dolorosas. «Aprendamos unos de otros, compartamos nuestras experiencias y descubramos nuevas formas de abordar las heridas para trabajar en su prevención y cuidado», concluyó José Jolín.
Los asistentes pudieron disfrutar de la ponencia de Manuel Gerónimo, anestesiólogo del Complejo Universitario de Albacete, quien analizó el tratamiento analgésico de las heridas crónicas. El tratamiento del dolor en las heridas, su manejo y cuidado fue también objeto de debate en el encuentro, que finalizó con la ponencia de Rubén Molina, enfermero referente de heridas y miembro del grupo de heridas de la Gerencia Territorial de Barcelona, sobre el uso seguro de la terapia compresiva.