La detección del metano desde el espacio es el gran objetivo de las cámaras fotográficas que la empresa vizcaína Satlantis embarcó en satélites que dan una vuelta alrededor del planeta en solo noventa minutos. A través de imágenes de las zonas donde hay fábricas y tuberías que conducen este gas pueden observar en qué puntos se producen las fugas. 

En esta compañía tiene un papel destacado la directora de software, la palentina Ana MoretónFernández.Doctora en Informática e ingeniera electrónica por la UVa, llegó a la empresa vasca hace tres años y contribuye con su labor y esfuerzo al crecimiento de la misma. «Cuando entré yo éramos dos en el equipo de software y ahora somos nueve y hemos lanzado tres satélites, de los cuales también hacemos el software para operarlos», detalla la palentina de 33 años, que guarda un grato recuerdo del primero de los tres lanzamientos, el del satélite Urdaneta, que tuvo lugar hace dos años desde Cabo Cañaveral.Explica que acudió casi todo el equipo hasta Florida y que fue «una experiencia única».

Más allá de esta visita a Estados Unidos, Moretón subraya que le gusta mucho su trabajo porque «es pura ciencia». «Aquí no producimos miles de cosas. Hacemos un satélite y ese tiene que salir bien.Se mira a fondo y, si aparece el más mínimo fallo, se investiga el porqué», asegura. Además, explica que es un sector «en el que estamos siempre aprendiendo» y que toca muchos campos, desde la óptica hasta los sistemas espaciales, hechos que también le satisfacen enormemente. «No hay día en el que no conozca cosas nuevas y eso es lo que me gusta: aprender», sentencia. Y en el futuro espera seguir haciéndolo. 

Por otro lado, señala que su empresa le permite teletrabajar y siempre que puede se desplaza desde Vizcaya a su Palencia natal. De hecho, entre sus pasatiempos cita pasear al perro en compañía de su madre por  las Huertas del Obispo. Esta circunstancia, sin duda, también contribuye a que sea una «buena elección» su empleo actual, al que llegó tras pasar por diversas empresas y la universidad. 

De la investigación académica admite que acabó algo desilusionada por el «exceso de burocracia», mientras que de su primera experiencia en una compañía privada, Renault, declara que aprendió bastante durante el año que permaneció en el área de investigación y desarrollo, pero comenta que es un sector «muy seguro en el que no hay grandes cambios», por lo que decidió probar suerte en otros lugares. A continuación pasó a Ebikemotion (actual Mahle), donde estuvo más de dos años y llegó a ser responsable de electrónica.«Guardo muchos buenos recuerdos de aquella época y la empresa sigue creciendo, pero un día me llamaron de Satlantis y me decidí a ir para allá», señala Moretón, que mirando al cielo puede ver su trabajo, algo que no está al alcance de cualquiera. Su esfuerzo le ha costado, claro está.