UGT y CCOO recordaron ayer la importancia de salir a la calle mañana domingo, con motivo de la manifestación del Primero de Mayo, «porque aún hay mucho que reivindicar».

Bajo el lema Contra la pobreza salarial y social. Trabajo y derechos, los sindicatos reclaman que se ponga fin a las políticas de austeridad, un salario mínimo interprofesional digno, creación de empleo estable y con derechos y el incremento de la protección por desempleo en tiempo y cuantía.

El secretario provincial de Comisiones Obreras, Luis González, recordó  que en la actualidad el hecho de tener trabajo no implica no estar en riesgo de exclusión social y lamentó que no se hable de la parte oculta de los datos de contratación, «en lo que el 94 o el 95 por ciento son eventuales y más del 26 por ciento son de jornada parcial, lo que supone una reducción salarial».

González  explicó que entre las reivindicaciones que se tienen que hacer en este Primero de Mayo figuran la derogación de la Lomce «y un pacto serio por la Enseñanza que dure más que lo dura una legislatura», indicó. Abogó por un cambio en el modelo productivo para no depender de los servicios y el turismo, al tiempo que reclamó la derogación de las dos reformas laborales para poder retomar la negociación colectiva, acabar con la Ley Mordaza y el Tratado Trasatlántico de Libre Comercio «y dejar de ser la vergüenza del mundo, acoger a los refugiados sirios y poner fin al acuerdo con Turquía». «Los trabajadores deben recordar que hay mucho que reivindicar y es mucho lo que nos han robado», concluyó.

El secretario provincial de UGT, Julián Martínez, recordó algunos datos como que en Palencia hay 6.000 parados de más de 45 años, 5.500 desempleados de larga duración y un elevado porcentaje de población de más de 64 años, «el colectivo que más va a crecer en los próximos años. Los jóvenes se  van y en 2015 se perdieron 1.480 habitantes». Y es que, para el secretario provincial de UGT, «Palencia, a pesar de sus potencialidades tiene defectos estructurales» que pasan por que la actividad económica de la provincia se centra en la zona de Aguilar, la capital y su alfoz. Mientras zonas como Guardo y otras del medio rural palentino que dependían de sectores como la minería y el lácteo «están el peligro de extinción».

Julián Martínez aseveró que solo Renault no va a conseguir sacar  de la delicada situación en la que está la provincia, «ni siquiera incluyendo al sector agroalimentario», y destacó que la mayor parte de la mano de obra está en la pequeña empresa. «El comercio está en una situación peligrosa y necesita revitalizarse. Hay que diversificar la economía de Palencia para salir del perfil gris que tiene y que la hace poco atractiva», apostilló.

Habló también de las Mesas de Diálogo Social que se han puesto en marcha recientemente en el Ayuntamiento y la Diputación de Palencia y exigió un funcionamiento real «porque no basta solo con constituirlas, sino que deben ser instrumentos válidos para los necesitados».

A todo esto «se une la incertidumbre política», y es que «sin un gobierno no se pueden tomar decisiones»; por lo que exigió la formación de un Ejecutivo «pronto».

Julián Martínez recordó que hay dos armas para acabar con las dinámicas políticas. «La primera, la individual, está en el voto» y pidió que de cara al 26-J no se emplee la abstención «como queja por los políticos que hay».

La segunda es la movilización «porque solo los grandes cambios se han dado cuando los políticos han visto gente en la calle», por lo que animó a todos los palentinos a acudir mañana a la manifestación que partirá a las 12,30 horas del Parque del Salón con su recorrido habitual por la Calle Mayor hasta la Plaza Mayor donde tendrá lugar la lectura del manifiesto.

CGT. La Confederación General del Trabajo (CGT) también saldrá mañana a la calle para reconquistar libertades y derechos, tal y como reza su lema.

La organización sindical recuerda «las tremendas agresiones laborales» que han sufrido estos años los trabajadores. «Derechos que han expropiado a las personas trabajadoras imponiendo la flexibilidad en las empresas donde las condiciones de trabajo son administradas y decididas unilateralmente por el capital, provocando que los costes laborales disminuyan significativamente, en especial el despido», según se recoge en el comunicado de CGT.

El sindicato no se olvida en sus reivindicaciones del paro juvenil, ni de los recortes en las pensiones. Además, recuerda que con la Ley Mordaza «la libertad de expresión, de manifestación, de huelga y de disidencia han sido liquidadas».

CGT hace un llamamiento a las personas que sufren este tipo de situaciones para que salga a la calle mañana. El sindicato instalará la caseta libertaria a partir de las 12 horas en Abilio Calderón.