Los representantes de la plantilla de Cerealto Siro en Aguilar, que cuenta con 274 personas, cumplieron ayer su amenaza tras dos reuniones fallidas con el CEO de la compañía, Bosco Fonts, y promovieron una concentración a las puertas de la factoría para reclamar subidas reflejadas en las tablas salariales e inversiones reales pactadas en el Ministerio de Industria en el marco del Plan de Competitividad a final de 2022. En los distintos turnos de trabajo -a las 13, las 15, las 21 y 23 horas- se dieron cita con una pancarta a las puertas de la factoría agroalimentaria integrantes del comité de empresas, que leyeron un comunicado.
«Por la mañana se dieron cita unas 100 personas y otras tantas en las entradas y salidas de los turnos de trabajo y se trata de empezar bien, para meter un poco a la gente en situación de que vamos a tener que pelear mucho. La verdad es que el respaldo es considerable y ha venido a apoyarnos gente del pueblo y de otras factorías como las de Vida y Gullón», explicó a DP Alfredo Alonso, presidente del comité de empresa.
De momento, la empresa solo ha realizado una pequeña oferta de incremento salarial este año de un 4%, que viene a a ser entre 1.000 y 1.200 euros en un bono-paga. «Hoy -por ayer- esperábamos que la dirección nos hubiera ofertado algo más para evitar la protesta. Rechazamos esta paga porque la subida para este año se tiene que ver reflejada en las tablas salariales», expuso.
Protesta en Siro Aguilar para pedir más salarios e inversionesmás subidas. La petición de incremento salarial inicial que pretenden los sindicatos -dados los beneficios que genera la factoría aguilarense de Cerealto Siro- se centra en un 4% para el 2024, un 2% para el 2025 y un 2% en 2026, independientemente de lo que surja de la negociación colectiva que se iniciará el1 de enero del último de los años citados.
Sobre la planta aguilarense, los representantes de los trabajadores se mostraron claros. «La dirección esboza proyectos a futuro, pero nosotros queremos realidades, ya que las inversiones previstas no se ven por ninguna parte», concretó.
Alfredo Alonso aludió a los acuerdos del Plan de Competitividad pactado entre sindicatos, instituciones, Ministerio de Industria y los nuevos propietarios, Afendis y Davidson Kempner, que tienen el 75% de la compañía. «La demanda productiva se podría cubrir con maquinaria nueva y ser más competitivos, fijar carga de trabajo en Aguilar y crecer en empleo y en fortaleza de cara a una posible venta. Es a lo que vamos a estar abocados en pocos años, ya que conocemos cómo funciona un fondo de inversión. Si encima no inviertes, pues no te puedes hacer fuerte de ninguna forma», concluyó.