Chocolates Trapa fue fundada en 1891 por los monjes trapenses de San Isidro de Dueñas y, tras ser la marca artífice de los primeros bombones fabricados en España en los años 60 del siglo pasado, a finales de 2013 tomó un nuevo rumbo tras la adquisición de la compañía por una nueva propiedad de capital cien por cien español, más concretamente palentino, con la familia Fernández Calvo.
El aumento exponencial de sus ventas responde además a una estrategia de expansión tanto por el territorio nacional, donde recientemente la marca ha entrado en Cataluña, como en el mercado exterior, con un 33 por ciento de sus ventas procedentes de la exportación. Otro 33 por ciento responde a las ventas en el mercado interior y el 33 por ciento restante a ventas como distribuidor (MDD) o marca blanca.
Durante la última década, Chocolates Trapa ha invertido más de 35 millones de euros en la ampliación y el equipamiento de la fábrica palentina, en equipo humano y, sobre todo, en I+D+i, «pilar de la compañía», según explican sus responsables. Así, la marca ha ido introduciendo cambios encaminados a mejorar sus fórmulas y ampliar su porfolio para adaptarse a las necesidades actuales del mercado y a los gustos de los consumidores, según explica a Diario Palentino, Ángel Amador, Dircom de la chocolatera eldanense.
Europraliné consolida en 10 años a Trapa como top en España - Foto: REPORTAJE GRÁFICO: SARA MUNIOSGURENPero este crecimiento no solo se ha visto consolidado en el plano inversor. En esta última década, la plantilla ha pasado de los 70 a los 150 trabajadores actualmente, que se aupan hasta los 200 con los eventuales en las grandes campañas. «Durante el pasado año firmamos 40 contratos fijos», pormenoriza Ángel Amador. Asimismo, Chocolates Trapa, con 290 productos, está presente actualmente en más de 50 países, incluído Estados Unidos o los países Árabes, grandes consumidores de bombones a granel. «Después de 10 ejercicios económicos y tras las importantes inversiones realizadas, podemos decir, sin lugar a dudas, que ya somos rentables. De hecho, ahora mismo somos una de las grandes referencias nacionales en cuanto a bombones, chocolate y turrones», reitera Amador, quien no oculta su orgullo al manifestar que «ahora en España se habla sin tapujos de Trapa. Los consumidores han vuelto a apostar por una marca de referencia y no solo en Castilla y León. Ha recuperado su presencia».
«El esfuerzo realizado por la familia Fernández Calvo ha sido titánico. Basta recordar los números: En el ejercicio de 2013 la firma facturó 1,5 millones de euros, mientras que en el último hemos rozado los 40 millones. La fábrica se ha ampliado con nuevas líneas de producción y tecnología punta. De hecho, somos la fábrica del sector más moderna de España y la cuarta de Europa», recalca el Dircom de la chocolatera eldanense.
El propio CEO de Chocolates Trapa, Gerardo Fernández Calvo, ya indicó recientemente que «en esta primera década hemos cumplido el objetivo de ser rentables a pesar del contexto inflacionario y de la subida de precios generalizada y, en especial, del cacao».
Europraliné consolida en 10 años a Trapa como top en España - Foto: REPORTAJE GRÁFICO: SARA MUNIOSGURENPor lo demás, en la última década, la compañía palentina también ha otorgado un papel muy importante a la preservación de la naturaleza. En esta línea, algunos de los hitos más importantes de la empresa en esta última década han sido la eliminación del aceite de palma de todos sus productos con el objetivo de frenar la deforestación y mantener la biodiversidad, y la instalación de 1.926 paneles fotovoltaicos para reducir hasta un 31 por ciento el consumo eléctrico y evitar emitir más de 218 toneladas de dióxido de carbono (CO2) cada año.
Ángel Amador reitera que a medio plazo los grandes objetivos de la firma pasan «por seguir escalando puestos en el ranking nacional como empresa de referencia en el sector, consolidar las ventas al exterior, aumentar el número de empleados y, por supuesto, la facturación».
La firma chocolatera eldanense aumentó sus ventas en 2023 un 46%
La compañía palentina aumentó sus ventas un 46 por ciento durante el año 2023, lo que le permitió rozar los 40 millones de facturación.
Así, la empresa chocolatera experimentó un notable crecimiento desde 2013 hasta pasar del millón y medio facturado aquel año a los 39,3 millones de euros de ingresos totales una década después, en 2023. Para el CEO y presidente de Chocolates Trapa, Gerardo Fernández Calvo, se trata de unos resultados muy positivos, que vienen a refrendar la dirección tomada por la actual propiedad en 2013: «En esta primera década hemos cumplido el objetivo de ser rentables a pesar del contexto inflacionario y de la subida de precios generalizada y, en especial, del cacao». Asimismo, la chocolatera palentina consiguió el sello Sabor del Año 2024 para cuatro de sus productos como son los bombones Trapa Sublimes y Trapa Sublimes 0% Azúcares Añadidos, y las tabletas Collection 85% Cacao y Chocolate Blanco 0% Azúcares Añadidos. Se trata de un sello muy relevante, ya que los productos candidatos son probados y evaluados por los propios consumidores mediante un examen gustativo a ciegas en laboratorios de análisis sensorial de reconocido prestigio en España.
Europraliné consolida en 10 años a Trapa como top en España - Foto: REPORTAJE GRÁFICO: SARA MUNIOSGURENLa metodología utilizada por Sabor del Año implica a un panel de consumidores que efectúan una cata sin referencia de marca y evalúan cinco criterios: sabor, aspecto, olor, textura y apreciación global, otorgando a cada uno de ellos una puntuación de cero a diez y aportando sus impresiones subjetivas y anónimas
Una empresa con innovación, diseño y conciencia social y medioambiental
Los premios Reforest Project 2023 se han celebrado recientemente con la misión de homenajear proyectos de instituciones, empresas y medios de comunicación, por su activismo medioambiental y su implicación con el cuidado del planeta Tierra.
Se concedieron un total de quince premios: quince palas de oro que buscan representar el que la Fundación Reforest Project persigue con su trabajo.
Entre las empresas y fundaciones, se homenajeó en el evento la labor proactiva de Chocolates Trapa. No hay que olvidar que la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente se han posicionado, especialmente a raíz de la pandemia, como pilares indiscutibles del propósito ciudadano de las compañías. No obstante, se trata de una apuesta que lleva formando parte de las estrategias a largo plazo de algunas empresas desde hace años. Ese es el caso de Chocolates Trapa, que en 2013 inició un nuevo rumbo marcado por una nueva propiedad y por una filosofía basada en tres pilares: innovación, diseño y conciencia social y medioambiental. Es por ello que la chocolatera eldanense ha buscado aportar su granito de arena en la lucha contra este problema colectivo con la intención de, según apuntan desde la marca, «sembrar un futuro mejor para todos». Así, su objetivo es plantar una gran cantidad de ejemplares autóctonos de aproximadamente un metro de altura que, cuando alcancen la edad adulta, serán capaces de absorber una media de 50.000 toneladas de CO2 al año.
Un proyecto lleno de grandes retos
El Juzgado Número 1, en calidad de Juzgado de lo Mercantil, dictó en octubre de 2013 el auto de adjudicación, a propuesta de la administración concursal, de la unidad productiva de Chocolates Trapa en favor de la firma Europraliné (nombre de la firma comercializadora de Chocolates Trapa) conforme al plan de liquidación dictado en abril de ese año, según informó entonces Diario Palentino.
Europraliné consolida en 10 años a Trapa como top en España - Foto: REPORTAJE GRÁFICO: SARA MUNIOSGURENEl auto de adjudicación estableció, asimismo, los bienes y derechos de la denominada unidad productiva de Trapa que fueron transferidos a Europraliné, como la fábrica de chocolate, dos naves, una zona de porche descubierto y las correspondientes parcelas.
El juez impulsó un mandamiento de cancelación de embargos o cargas sobre los bienes y derechos que integraban la unidad productiva, o deudas anteriores y posteriores al concurso, que fueron constituidas para garantizar los créditos concursales.
En el plano comercial, la autoridad judicial autorizó el uso de las marcas de Chocolates Trapa que se habían venido utilizando por la unidad productiva como Herminia, Sabu, Carrillón, Trapa y Plin. A partir de aquí, la familia Calvo, a través de Gerardo Fernández Calvo, como presidente, y Julio Calvo Caminero, como consejero, de origen palentino, se pusieron al frente de Europraliné con una plantilla de 70 personas, incluidos directivos, que apuestan fuerte a través de Trapa por el sector chocolatero, con pasos muy firmes en los mercados nacional e internacional.Con este auto se ponía prácticamente fin al proceso concursal en el que se vio inmerso la chocolatera con sede en Dueñas en mayo de 2011. En aquellas fechas, la presentación del concurso de acreedores fue calificada como «una situación previsible y necesaria» para salvar la actividad y los puestos de trabajo de Trapa», según informó en su momento el sindicato UGT, mayoritario en el Comité de Empresa.
Europraliné consolida en 10 años a Trapa como top en España - Foto: REPORTAJE GRÁFICO: SARA MUNIOSGURENTal y como anunciaron sus responsables, Europraliné tenía intención de relanzar las marcas de Chocolates Trapa «con un proyecto empresarial nuevo que contaba con el máximo respaldo de los accionistas y del equipo directivo». «Hemos decidido apostar por el proyecto Trapa, que nos permite afrontar un plan de negocio con el que estamos plenamente convencidos y comprometidos. Nuestro objetivo es construir una empresa moderna y competitiva», aseguraron en su momento los responsables de la chocolatera.
«Chocolates Trapa es un proyecto lleno de retos, que abordamos con ilusión y compromiso. Asumimos la dirección de la empresa Europraliné, con un plan de negocio sostenible, que permitirá recuperar el posicionamiento del mercado y la confianza del consumidor», recordaron entonces.