La Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias (Etsiiaa) del campus palentino es objeto de una actuación planteada dentro de la política general de la Universidad de Valladolid (UVa) que contempla como pilar fundamental la sostenibilidad energética, de forma que los edificios y su entorno construido sean eficientes en energía y recursos rentables y con menores costes durante su ciclo de vida, además de respetuosos con el medio ambiente.
Se trata de una rehabilitación energética de la Etsiiaa centrada en la renovación de la envolvente exterior de forma global -carpintería, cubiertas y fachadas- para conseguir una importante disminución de las necesidades energéticas y la mejora tanto de la iluminación interior, con la sustitución de las luminarias existentes por otras de alta eficiencia que se alojarán en un sistema de falsos techos registrables, como de las instalaciones de calefacción con el modificado del sistema de aporte de calor al invernadero, la sectorización de los circuitos existentes y la adecuación de la sala de calderas a la conexión a la red de biomasa construida en el campus. Con la ejecución de este proyecto se conseguirá la reducción de, al menos, un 80% de las emisiones de CO2, además de repercutir en los usuarios, que disfrutarán de unas instalaciones más eficientes y modernas.
La intervención, adjudicada a Ceviam EPC SL el pasado 16 de enero por 2.279.604,40 euros (IVA incluido) está cofinanciada con fondos de la Unión Europea, dentro del programa de financiación del Fondo de Transición Justa de España 2021-2027 y, por otra parte, por la Junta de Castilla y León.
El edificio de la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias se construyó en 1982 según el proyecto de Ángel Fernández Alba. Tiene una superficie total construida de 9.111 metros cuadrados y cuenta con dos bloques edificatorios, uno, el docente propiamente dicho con aulas y despachos, y otro que alberga los invernaderos, cafetería, taller de maquinaria, salón de actos y algunos laboratorios. Constructivamente, presenta unas fachadas de dos hojas, sin aislamiento entre ellas y con carpinterías de aluminio sin rotura de puente térmico y vidrio doble 4+6+4, con cubiertas de chapa sobre forjados planos y cubiertas planas sobre las aulas, también sin aislamiento, lo que genera una envolvente no aislada con un gran consumo energético.
lámina de acero. Según contempla el proyecto en ejecución, en las fachadas se implementará un SATE (Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior) compuesto por una estructura de soporte de una lámina exterior de acero que hará de acabado de la nueva fachada. Fijado a la hoja exterior existente de ladrillo cara vista de color verde -que carecteriza a la Etsiiaa- se colocará un aislamiento de lana de roca de diez centímetros de espesor. Entre este aislamiento y la nueva hoja exterior de acero se interpondrá una cámara de aire ventilada de cuatro centímetros.
cubierta ajardinada. Se diferencian dos tipos de cubiertas existentes: las transitables de zonas de terrazas en las que se implementará aislamiento térmico en los espacios disponibles entre los elementos de soporte del pavimento (10 cm de XPS), también se renovará este pavimento, instalando una cubierta ajardinada; en el resto de las cubiertas se implementará una cubierta deck compuesta por aislamiento rígido de ocho centímetros y lámina impermeabilizante sobre la cubierta actual de panel de chapa grecada y que se extiende por el peto de cubierta hasta la albardilla superior.
Asimismo se sustituirán las carpinterías metálicas exteriores por otras con RPT, vidrios dobles bajo emisivos y con control solar.
El acabado será en dos colores para chapa plegada, uno para el edificio y otro para el ático y para zócalos y áreas con acabado enfoscado.
Para mejorar las condiciones acústicas y de iluminación, se opta por la colocación de falsos techos colgados y registrables, que se descuelgan entre 20 y 25 centímetros, excepto en la zona común de la planta baja, en la que se descuelgan 40 para salvar las canalizaciones de calefacción existentes. Se colocarán dos tipos diferentes de falso techo, ambos con fajas perimetrales de cartón yeso continuas, en las aulas y las zonas comunes.
En el acceso al edificio se colocará un falso techo de lamas de madera de pino machihembradas, claveteadas sobre rastreles de la misma madera y colgadas del techo con perfil de acero galvanizado.
Una de las actuaciones consiste en la reforma de la instalación de iluminación existente (tanto general como de emergencia), con objeto de proceder a la sustitución de las luminarias existentes por otras de tecnología LED de bajo consumo.
Con estas actuaciones se conseguirá reducir el consumo energético de la Etsiiaa tras la reforma de la instalación de iluminación existente. Además, se logrará proporcionar una infraestructura eléctrica de baja tensión a todas las dependencias, a fin de dotarlas de todos los servicios y equipos necesarios para su correcto funcionamiento e integración.
Señalar por último que en el edificio de Agrarias actualmente se ubica un invernadero formado por cuatro módulos, con techos a dos aguas cada uno de ellos. Después de analizar los distintos sistemas y alternativas de calefactar unas instalaciones de las características de las actuales, se propone como sistema más eficiente para dotar de calefacción a las instalaciones el montaje de una unidad de climatización de aire con una batería de calor, que generará el aire necesario para el calentamiento del invernadero y que se distribuirá mediante un sistema de 22 difusores de desplazamiento estratégicamente ubicados en el invernadero.
El director de la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias (Etsiiaa), Luis Miguel Cárcel, explica que el plazo de ejecución de esta rehabilitación es de diez meses y va a suponer para el centro que «cambie completamente de imagen y sea eficiente energéticamente, un ahorro importante para la universidad». «La inversión en Agrarias es de unos dos millones de euros y van a bajar los consumos energéticos considerablemente, con lo cual tiene un retorno importante», añade.
Cárcel señala que desde el 18 de marzo las clases se dan en el edificio E y en el Aulario y en el Verde únicamente quedan algunas prácticas «porque cambiar equipos es costoso». «Las molestias, en principio, van a a ser solo de ruido, pero cuando empiecen a cambiar toda la carpintería y la instalación eléctrica se van a tener que abandonar temporalmente los despachos y los laboratorios para poder hacer la obra», manifiesta.
La contrata, asevera el director de la Etsiiaa, «ha hecho una buena programación; creen que pueden terminar antes del plazo y que no van a interrumpir demasiado la docencia, de forma que se trabajará mucho en el verano y en septiembre, cuando empiece el curso, se podrá usar el edificio disponible aunque todavía no estará rematado. Parece que los remates que van a quedar para después del verano van a ser la zona donde está el salón de actos y la cafetería».
Debido a estas obras, la Olimpiada Agroalimentaria se suspende y el salón de actos quedará inutilizado temporalmente, donde también se va a cambiar la iluminación y la carpintería.
En septiembre del pasado año se formalizó el contrato, adjudicado en 169.400 euros, para la redacción del proyecto básico y de ejecución de la rehabilitación energética integral del Aulario del campus de La Yutera, con un plazo de ejecución máximo de ocho meses, con lo que en breve se podrán licitar las obras.
El programa de necesidades se organiza alrededor de la reducción de las emisiones de CO2, hasta un porcentaje mínimo del 80%; el cumplimiento de la protección ambiental del edificio y las determinaciones del PGOU de Palencia y del Código Técnico de la Edificación y la definición de una propuesta arquitectónica que ponga en valor las características propias del edificio y su estética industrial, adaptada a los usos docentes y las necesidades actuales en consonancia con los criterios de la Nueva Bauhaus Europea.
La rehabilitación del Aulario se plantea para lograr un edificio sostenible con un mejor rendimiento energético y bajas emisiones de carbono además de abordar aspectos fundamentales como la mejora de las condiciones interiores mediante una calidad del ambiente (ventilación y calidad de aire, confort térmico, acústico y visual) que influyan sobre el bienestar y la salud.
La actuación estará cofinanciada con fondos de la Unión Europea, dentro del programa de financiación del Fondo de Transición Justa de España 2021-2027 y, por otra parte, por la Junta de Castilla y León.
Las actuaciones en Agrarias y Aulario harán del campus un referente en eficiencia energética, según la UVa. La política medioambiental de esta contempla eleminar elementos de edificaciones que contengan amianto, y que, en este caso, se sitúan en las cubiertas del Centro de Tecnología de los Cereales (Cetece). La retirada de la sobrecubierta implica una solución para esta cubierta plana que no dispone de aislamiento, que incluye el proyecto.