Mariano Haro se colgará a título póstumo la que será (al menos de momento) su última presea, la Medalla de Oro de la Diputación. Un más que merecido reconocimiento que dio sus primeros pasos ayer en el pleno ordinario correspondiente al mes de septiembre, en el que se aprobó por unanimidad la propuesta de la presidenta, Ángeles Armisén, para iniciar el expediente de la concesión de la más alta distinción institución de la administración provincial.
«Nos deja un legado imborrable de inspiración y compromiso que no solo pertenece al deporte, sino a la cultura y al alma de esta tierra», señaló Armisén como uno de los principales avales para esta concesión al León de Becerril. «Desde sus primeras competiciones, hasta sus triunfos más sonados, siempre fue un embajador ejemplar de los valores del deporte: esfuerzo, disciplina, respeto y solidaridad. Su dedicación no solo llevó el nombre de la provincia a lo más alto del deporte mundial, sino que también se convirtió en un modelo de perseverancia y dignidad», afirmó sobre el mejor atleta español de todos los tiempos, mejor deportista palentino de la historia, fallecido el pasado 27 de julio a los 84 años de edad.
Mariano Haro fue un referente en todas sus facetas, no solo en la deportiva, donde consiguió innumerables títulos a nivel nacional e internacional, «ejerciendo siempre como un gran embajador de Palencia en el exterior». Además, fue «ejemplo de compromiso» para las futuras generaciones y destacó por su «calidad humana, su humildad y su increbrantable espíritu de superación», desgranó la presidenta.
Un compromiso personal que trascendió lo deportivo y se adentró en la vida política más cercana, la local. Así, ejerció como alcalde entre 1979 y 2003 de su localidad natal, Becerril de Campos, lo que le abrió la puerta también a la corporación provincial.
EN MANOS DE CULTURA
En cuanto al procedimiento que culminará con la concesión de la medalla, el siguiente paso es que la Comisión de Cultura (con la diputada del área, Carolina Valbuena, al frente) inicie el oportuno expediente justificativo, según establece el Reglamento de Honores y Distinciones de la Diputación en el que deberán quedar debidamente reflejados los méritos que le hacen merecedor de tan alto reconocimiento.
Así se recoge en el reglamento de Honores y Distinciones de la Diputación (publicado en el año 1955 y al que ha tenido acceso Diario Palentino). Más concretamente, el artículo tercero otorga la posibilidad de rendir tributo a aquellas personas cuya trayectoria haya sido excepcional y ejemplar, contribuyendo de manera notable al prestigio de la tierra y a los valores que defendemos como sociedad.