Generar conocimiento científico sobre los factores que pueden influir en el comportamiento del toro durante los tres días previos a la lidia, es decir, desde que sale de la finca hasta que recibe muerte en el ruedo. Ese es el objetivo del trabajo de investigación que está llevando a cabo estos días en Campos Góticos un equipo de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de León.
Para ello, han colocado en los corrales y chiqueros de la plaza de toros una serie de cámaras que registran los movimientos de los morlacos con vídeos breves cada minuto de tal manera que se puede comprobar si han comido con normalidad, beben, descansan o han tenido alguna pelea entre ellos, por ejemplo. A ello se suman diversas analíticas de sangre o una toma de muestra de las heces, que posteriormente se analizan en el laboratorio.
También se recogen datos de las condiciones ambientales del transporte, tales como la humedad relativa o la temperatura del cajón en el que se le traslada por carretera. Además de datos como los kilómetros recorridos y cuánto tiempo tardan en completar el viaje hasta su lugar de destino. Y es que este mismo estudio también se ha realizado ya en las ciudades de León y Burgos, y en las próximas semanas se hará lo propio en Valladolid y Salamanca, al calor de este trabajo de investigación financiado por la Junta de CyL a través de la Consejería de Cultura.
Los toros, al servicio de la ciencia
- Foto: Óscar NavarroEl equipo de investigadores que recorre durante la presente temporada las citadas cinco plazas de toros castellanas y leonesas es bastante amplio, si bien a Palencia se han desplazado solo tres profesionales. Su reto es «ayudar con los resultados del trabajo de investigación a tomar las mejores decisiones sobre el manejo del toro en los días previos a la lidia», explica la experta Marta Alonso a Diario Palentino.
Por el momento, aún es pronto para hablar de resultados, pues todavía queda mucho por analizar y muchas tardes de toros por examinar. No obstante, a este equipo de investigación le avalan más de tres décadas de trabajo ligados al toro bravo, con diversas tesis doctorales, numerosos artículos y publicaciones y estudios como el del enfundado que llevó a cabo en el año 2012.