Editorial

Lo local importa y las quejas al Procurador del Común son un ejemplo de ello

Diario Palentino
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Aquello que toca de cerca o directamente de lleno no se deja de lado y más si no gusta, es poco agradable o, bajo el punto de vista del vecino, es ilegal

El Procurador del Común, la institución de Castilla y León que defiende los derechos de los ciudadanos de la comunidad autónoma, recibió 135 quejas emitidas desde Palencia durante el pasado ejercicio, lo que viene a ser una casi cada tres días.

Al menos en el caso palentino, sobresale que 46 peticiones (el 34% de las recibidas de la provincia) llegaron motivadas por las administraciones locales, que hicieron o dejaron de hacer ciertas actuaciones que provocaron la reclamación de una o más personas. Quizá a más de uno le parezca extraño, pero muchas de las protestas al defensor del pueblo castellano y leonés tienen que ver con asuntos que no van a abrir telediarios de televisiones nacionales ni aparecerán en cabeceras de periódicos estatales. 

Además, a las personas ajenas les parecerá, en ciertos casos, hasta exagerado elevar una instancia oficial para tratar temas como el alumbrado público o, incluso, la colocación del camión-escenario de una orquesta que amenizará una de las noches de las fiestas patronales. La Junta de Castilla y León y otras administraciones públicas tampoco quedan fuera de las reclamaciones de los palentinos, que piden, por poner un ejemplo, un mayor cuidado del Canal de Castilla.

Para emitir una resolución justa es necesario que el personal dependiente del Procurador del Común conozca todos los puntos de vista y, para ello, las instituciones tienen que facilitar toda la información sin esconder nada. Es su obligación como servicio público que son. Aparecer en listados de entidades no colaboradoras tendría que suponer cierta vergüenza, puesto que no han atendido adecuadamente a un órgano que siempre está ahí para hacer de conciencia (o de Pepito Grillo) y que puede evitar, con sus resoluciones, males mayores ,y más en pequeños pueblos donde los recursos humanos y económicos son limitados. Que los informes no sean vinculantes no quiere decir que no haya que cumplirlos.

De hecho, al ciudadano siempre le quedará recurrir a su Procurador, que tiene su sede en León. Las quejas que recibe este organismo dejan entrever que lo local importa mucho más de lo que pensamos. Desde un periódico provincial con más de 140 años de historia podemos afirmar que esto lo sabemos muy bien. El foco general en la mayor parte de bares y teleclubs de la provincia estará en la política nacional y en la última jornada de la Primera División de fútbol, pero lo que toca de cerca y directamente de lleno (de cualquier asunto que sea) no se deja de lado y más si no gusta, es poco agradable o, bajo el punto de vista del vecino, es ilegal. Y los representantes políticos tienen que tenerlo claro. Eso sí, nadie tiene que abusar del defensor para no entorpecer su labor.