Uno de los motivos por los que la anterior Corporación dejó sobre la mesa la aprobación del PERI-5, el que define cómo se urbanizarán los entornos de la dársena del Canal de Castilla, fue la petición del grupo municipal de Vox de la elaboración de un informe de Policía Local sobre el impacto que dicho desarrollo urbanístico tendrá en el tráfico, tras la advertencia de plataformas y vecinos de que podría llegar a crear un problema en el Puente Mayor.

Dicho informe se ha terminado de elaborar hace solo unos días y sus conclusiones, la Policía Local se circunscribe a señalar que «es necesaria la realización de estudios de tráfico y de transporte público que permitan evaluar el impacto generado por el desarrollo urbano en el ámbito de la movilidad».

Dicho de otra forma, que sin estaciones de aforo para efectuar un cálculo y análisis del tráfico en la zona no se puede «valorar de manera adecuada la ordenación viaria existente y plantear modificaciones en el entorno del PERI-5».

La Policía Local sí dice que «ante el presunto incremento de peatones» deberá tenerse en cuenta «el ancho de las aceras existentes tanto en el Puente Mayor como en la avenida de Viñalta y el Paseo de Faustino Calvo».