Original de Éric Assous y dirigida por Antonio Hortelano, La ilusión conyugal reúne en el escenario a Alejo Sauras,Alex Barahona y Ángela Cremonte. Esta representación, que comenzó su gira nacional el pasado julio, pone a los espectadores ante el dilema de la sinceridad y las infidelidades dentro de una pareja con un tono cómico.  

En el elenco de actores se encuentra Ángela Cremonte, quien ha participado en numerosas obras teatrales, así como en reconocidas series como Las chicas del cable.

La ilusión conyugal trata de fondo el tema de las mentiras y la infidelidades dentro de la pareja. ¿Busca la obra ser una denuncia social?
No. La obra tiene, sobre todo, una función lúdica, que es la de observar qué pasa cuando una pareja decide sincerarse. No es solo que decidan contarse que han sido infieles, sino especificar cuántas veces lo ha sido cada uno. Eso es lo que genera el conflicto, que agrupa tanto tragedia como comedia. 

No es en absoluto una función que quiera concienciar de nada ni dar un mensaje concreto. Quiere divertir y plantear al espectador si merece la pena ser sincero. Es, eminentemente, una comedia. 

Hábleme de su personaje
Es uno de los dos protagonistas, la mujer de Maxi. Los dos son clase alta, viven en una casa preciosa, limpia y sin ningún tipo de desorden ni emoción. Ella está muy cómoda en ese mundo de lujo, pero a la vez siente que le falta algo. 

¿Cuándo comenzaron la gira?
Empezamos el pasado julio. Hemos estado en Navidad siete semanas en Madrid y hemos retomado las representaciones la pasada semana. Está yendo muy bien la verdad. 

Trabaja junto Alejo Sauras y Alex Barahona. ¿Ha habido buenas sinergias en el escenario?
Nos llevamos los tres muy bien, así que sí las ha habido. 

Ha participado en numerosas series españolas, como Amar es para siempre, Las chicas del cable o Gran reserva. ¿Algún trabajo que recuerde con especial emoción?
Los actores recordamos con emoción todos los trabajos. He hecho también mucho teatro, así que me cuesta elegir. En televisión y ficción recuerdo con especial cariño las series Mentiras y Las chicas del cable. En el teatro, todos los trabajos que he hecho son con Miguel del Arco. 

¿Cómo empezó en la actuación?
Estaba estudiando Humanidades en la Universidad, aunque siempre había formado parte de los grupos de teatro del colegio. Se organizaron unas jornadas en las que participaron dramaturgos muy punteros del momento. En ellas, se hicieron lecturas dramatizadas para las que pidieron la ayuda de los estudiantes, y yo participé. En ese momento, me di cuenta que debía estudiar interpretación de una forma más seria y eso hice. No obstante, antes de todo esto, a los 16 años, ya había hecho una película.