La sequía arruina la producción de forraje

César Ceinos
-

Desde las organizaciones agrarias aseguran que la falta de veza y alfalfa repercutirá negativamente en los ganaderos

Imagen de archivo del campo palentino - Foto: Juan Mellado

Dice un conocido refrán que «en abril aguas mil», pero en el mes que acaba de terminar el agua ha brillado por su ausencia y la preocupación de los profesionales del campo ha ido en aumento. Además, por si fuera poco, las altas temperaturas, especialmente durante la pasada semana, también han afectado negativamente al campo palentino, según explican desde las principales organizaciones profesionales agrarias (opas) de la provincia. «Ya hay pérdidas», asegura el presidente de Asaja Palencia, José Luis Marcos. Por su parte, el secretario provincial de COAG, David Tejerina, lamenta que «el campo está cogiendo un tono amarillento» y su homólogo en UPA Palencia, Blas Donis, reclama, de seguir así las cosas, la convocatoria de la Mesa de la Sequía en Castilla y León y ayudas directas del gobierno autonómico para el sector.  

Los tres representantes de las opas coinciden en que la peor parte, al menos por ahora, se la está llevando la importante producción de forraje en tierras palentinas. «Somos una de las provincias de España más destacadas en alfalfa y veza y en la actualidad es un desastre», asevera Marcos antes de calificar como«irreversible» la situación. «Muchas parcelas no tienen siega.Está perdido prácticamente el 90% del producto», expone el máximo responsable de Asaja en Palencia tras recordar que es «la sementera más cara de la historia». «Desastroso» es el adjetivo que utiliza el dirigente provincial de COAG para definir el estado de la campaña de forraje. «En cultivos como la alfalfa, que ya se están segando, no ha salido prácticamente nada. En los de veza, que normalmente suelen recogerse por San Isidro en las comarcas de Tierra de Campos y el Cerrato, igual. No hay absolutamente nada», manifiesta Tejerina. Desde UPA, Donis declara que «la sequía está afectando a vezas y alfalfas, donde no ha habido prácticamente ninguna posibilidad, ningún corte».

Además, explican que este problema tendrá una repercusión muy negativa en las explotaciones ganaderas. «Hay muy poco producto y lo poco que hay será muy caro para los ganaderos. Por si fuera poco, es muy difícil de transportar», explica Marcos. Precisamente en este último punto hace también hincapié Donis, quien vaticina que si se produce poco forraje en la región la demanda superará a la oferta. «Corremos el riesgo de que la alimentación de los animales valga mucho dinero y los ganaderos tengan un coste añadido en sus explotaciones por la escasez», declara. Ante esta situación, Tejerina opina que este año «será terrorífico para los ganaderos porque no habrá paja». De hecho, comenta que se están comprando en la provincia pilas de paja «de hace tres años» y que, por si fuera poco, en otras zonas de España «es catastrófico». «No hay absolutamente nada», añade. Además, alerta de que, si el tiempo no lo remedia, Palencia «va camino de lo que ha ocurrido en Andalucía,Castilla-La Mancha y Extremadura», donde la falta de agua es más acuciante que aquí.

Pero la falta de agua va más allá. Está trastocando, en muchos casos, las rutinas de los agricultores a la hora de sembrar girasol. Normalmente se suele hacer en estas fechas, pero este año ha quedado en punto muerto hasta ver si el tiempo los acompaña durante los próximos días. «Es la época  de plantar el girasol y no se está realizando por la sequía. Además, este cultivo es bueno sembrarlo con humedad y no hay», declara Marcos. Esta incertidumbre también es patente en Donis, quien comenta que «la gente ha dejado de sembrar hasta ver si hay o no lluvias». En cambio, Tejerina, algo más pesimista, sentencia que «hay gente que tenía pensado sembrar girasol y no lo va a hacer porque no hay agua».

LLUVIAS. Dadas las circunstancias, a estas alturas del año, el gran deseo de todos los agricultores es que las nubes rieguen los campos de la provincia. «Los campos de secano, que son la mayoría en Palencia, están en una situación muy crítica. Ya hay pérdidas irreversibles», adelanta el presidente de Asaja. Una opinión muy similar tiene el principal representante de COAG, quien cree que si lloviera próximamente «se podría salvar bastante» del campo palentino. Por el contrario, si esto no ocurre «en condiciones» será «siniestro total». Donis, por su parte, explica que la sequía también está afectando a los prados del norte, donde sin el líquido elemento es imposible que crezca hierba, algo básico para la ganadería extensiva.

Por último, también anhelan la llegada de la lluvia para que los embalses del norte de la provincia se llenen de agua y la campaña de riego para los regadíos, que comenzó el 1 de abril, se desarrolle satisfactoriamente. En la actualidad, los mayores problemas se están registrando en el sistema Pisuerga, que se encuentra al 45,7% de su capacidad. Los embalses de Cervera-Ruesga, La Requejada y Aguilar de Campoo guardan 144,4 hectómetros cúbicos, una cifra muy inferior a la media registrada en el último decenio, que fue de 246,2 hm3. En la cuenca del Carrión, el porcentaje de llenado se eleva hasta el 81,7%. Camporredondo y Compuerto disponen de 133,8 hm3  de agua, un dato inferior al promedio de los diez años anteriores, que fue de 140 hm3 .

«Gracias al agua que se está aportando a las parcelas, los cultivos de regadío están en un estado normal», resumen desde Asaja, aunque, y en esto coinciden todas las opas, lo ideal sería no usar tanto líquido procedente del norte de la provincia en la actualidad por si las malas previsiones del tiempo se confirman.