El verde da color a los patios. El cemento ya no es protagonista de las zonas de recreo. Naturales ha dejado de ser una asignatura para convertirse en una práctica saliendo del aula. Zonas de plantas, árboles y huertos forman parte ya de un gran número de colegios. Las zonas de sombra aumentarán con el paso de los años dando cobijo en los días de más calor y reduciendo la temperatura de los espacios y las instalaciones para las áreas ajardinadas permitirán absorber agua de lluvia torrencial. Esto es lo que ha pasado en un total de 65 centros escogidos entre 293 que se presentaron  al 'Programa de renaturalización de patios escolares para su adaptación al cambio climático'. Se trata de una iniciativa de la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León que puso en marcha en 2021 y que en este curso han finalizado las obras  en los exteriores de los centros. 

Con la colaboración de las consejerías de Medio Ambiente y la de Educación, se han desarrollado actuaciones en las zonas de recreo de colegios e institutospara transformarlos. En pandemia se observó la necesidad de que los escolares puedan asistir a actividades educativas fuera de las aulas, pero los patios no estaban preparados para ello. 

Los entornos escolares son tan importantes para el desarrollo de los niños y los adolescentes como otros aspectos educativos y transformarlos en lugares más agradables era otro de los objetivos de este proyecto. Y el cambio ha sido integral. Cada centro contaba con 60.000 euros y, en total, se han destinado 4 millones de euros a mejorar las infraestructuras que proceden de los fondos REACT-UE. Aunque esta inversión se ha complementado con presupuesto y personal propio de las entidades que participan en este proyecto. 

Naturaleza dentro del cole

Fue en el curso 2021-2022 en el que lanzó el proyecto y se seleccionó a los participantes. El siguiente fue el turno de la redacción de proyectos y la contratación de las obras. De hecho, comenzaron algunas y para el curso que acaba de terminar se había previsto finalizar las obras y elaborar los manuales educativos y una web que ayudará a mantener las instalaciones. 

Las actuaciones

Si hay algo que ha guiado en la puesta en marcha de la renaturalización de los patios ha sido que el consumo de agua fuera bajo y que el mantenimiento fuera sencillo para favorecer la conservación a largo plazo. Hay centros con arbolado ornamental y en otros se han puesto árboles frutales. También hay zonas con plantas trepadoras y plnatas aromáticas. En determinados espacios se ha puesto césped y hay otros centros que han optado por instalar cultivos de frutos del bosque y vides. El huerto es otro gran protagonista en muchos de estos centros educativos. Además, se cuenta con un compostador y un aljibe recolector de agua fluvial que permite el riego. También se han instalado areneros, cajas refugio para quirópteros y cajas nivo para las aves. 

Los centros educativos han recibido un documento con cómo mantener todas estas instalaciones y luego otro informe específico según cada situación. Aunque «uno de los elementos más innovadores», según describe la Fundación, es que habrá cuadernos de mantenimiento curriculizados, es decir, actividades para que participen los alumnos en el aprendizaje al aire libre, desdes infantil a la ESO y Bachillerato. La idea es que los docentes usen estas instalaciones para dar clase y es que hay sugerencias para Ciencias Naturales, pero también para Historia o Fisolofía. Y para ello, se entregará un kit de herramientas a los centros de unos 200 euros cada uno. 

Los resultados

Los objetivos que se programaron en este proyecto han dado lugar a resultados sorprendentes, por ejemplo, hay 15.00 metros cuadrados de suelo permeable para prevenir las consecuencias de los episodios de lluvias extremas. También se han plantado 1.600 árboles (582 frutales y 1.076 autóctonos incrementado la superfice arbolada nueva en un 167 por ciento. Se han creado 2.000 metros cuadarados de huertos escolares con más de 2.000 arbustos frutales. Y eso supone aportar unos 7.000 metros cuadrados de suelo fértil a los patios. 

Se han introducido unas 28 especies vegetales nuevas, aumentando la biodiversidad animal asociada. Se han plantado 12.000 plantas aromáticas, vivaces y trepadoras y unos 5.500 arbustos para fomentar la conservación de polinizadores, pero se ha tenido en cuenta la selección de vegetales para que no contribuyan a procesos alérgicos y que no atraigan a insectos polinizadores peligros para el alumnado. 

Además, cada centro gana de media 600 metros cuadrados de sombra natural y se han generado 1.000 metros cuadrados de sombra con pérgolas vegetales. Por lo que se ha pasado de una superficie media verde de 5,42 a 11,02 metros cuadrados por alumno. 

En definitiva, se ha mejorado el entorno en el que se desarrollan y aprenden 17.000 alumnos. Y como el proyecto ha tenido tan buen acogida en la comunidad educativa, desde la Consejería de Medio Ambiente se está planteando la posibilidad de renaturalizar otros espacios públicos para adaptarlos al cambio climático. 

Un patio con frutales y 7 m2 cuadrados de verde por alumno

El colegio Fermoselle se encuentra en el suroeste de Zamora. Tiene 33 alumnos de entre 3 y 12 años, lo que permite una atención individualizada. La comunidad educativa se implica en un sinfín de proyectos. Con la obra de renaturalización, se han logrado 7 metros cuadrados por alumno y un total de 228 metros cuadrados de superfice verde. La superficie cubierta con arbolado es de 85 metros cuadrados y la de los huertos 15 metros cufrados. Se han plantado dos olivos, un almdendro, un kaki, un manzano, 30 plantas aromáticas y 10 plantas de frutos con bayas, entre otros.

Trepadoras y frutales para lograr 5 m2 de verde por alumno

El colegio se encuentra en Monzón de Campos, en la provincia de Palencia. Se cuenta con unos 100 alumnos escolarizados y una comunidad educativa implicada en actividades. Tiene muchos espacios aunque no estén utilizados por la diminución de estudiantes. Se han instalado 68 trepadoras, 24 árboles frutales y 12 arbustos de restauración paisajística. Se ha logrado con la renaturalización de parte de sus patios que haya casi cinco metros cuadrados de área verde por alumno; casi 480 metros cuadrados de superficie cubierta con arbolado; y casi 450 de suelo permeable.  / fundación patrimonio natural