No pudo ser. Marta García Alonso, en su primera participación olímpica, no pudo alcanzar la final de los 5.000 metros, al ser décima de su serie de semifinal, cuando precisaba estar entre las ocho mejores para clasificarse para la carrera del próximo lunes.

Marta partía con la décima mejor marca de las veinte participantes (la octava mejor de la temporada) de una serie de mucha calidad con la recordwoman mundial y la campeona olímpica, entre otras. Al no haber clasificación por tiempos, sino por puestos, la carrera fue muy táctica y la palentina supo leerla muy bien. Tomó la cuerda, no hizo ni un  metro de más y no realizó desgaste alguno. Siempre en medio del grupo a la expectativa de acontecimiento. La japonesa Yamamoto hizo de kamikaze, lanzándose en solitario antes de completar el primer mil. Nadie siguió su juego, tarde o temprano iba a caer como fruta madura, pese a que el ritmo no fuese elevado. Era evidente que Marta no iba a rebajar su récord de España. La campeona nacional es de carreras de ritmo sostenido, incluso lentas con un final rápido, pero no de fuertes cambios de ritmo. Y hubo uno letal a 500 metros para meta, nada más capturar a la japonesa. Se quedaba un grupo de diez que luchaba por las ocho plazas de la final.La primera que cedió metros fue la palentina, que no pudo repetir su remontada del Europeo en la vuelta final, quedando décima con un tiempo de 15'08''87.

«He creído que era igual que ellas y podía estar ahí y a falta de 500 metros me han faltado piernas y en un 5.000, cuando explotas, es difícil remontar.Lo he intentado, he apretado los dientes, pero ese cambio de ritmo no lo tengo, bueno sí lo tengo, pero no lo he sabido hacer. Pero ya lo he dicho antes; me faltaba cerrar un hueco y a nivel mundial ese hueco sigue ahí. Venía en buen estado de forma, pero ha sido una carrera táctica. Yo iba pensando que genial, que iba con gente top, pero me han faltado quinientos metros y es un mundo», afirmó.