El antiguo obispo de Navarra acompañará a Garciandía

Pablo Torres
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La ceremonia, que dará comienzo a las 11 horas en la catedral de San Antolín, contará con la participación del nuncio del Papa y del actual administrador apostólico

Mikel Garciandía, nuevo obispo de Palencia, tomará posesión este sábado - Foto: Ical

La diócesis ultima los preparativos para la ordenación y toma de posesión del nuevo obispo, Mikel Garciandía Goñi, quien desde este sábado será el prelado número 102 de Palencia. Si bien todavía no hay excesivas confirmaciones, las previsiones se sitúan en torno a los 2.000 asistentes, según afirmaron fuentes de la diócesis a Diario Palentino. Entre ellos, se prevé la presencia de unos 450 fieles navarros, quienes acudirán a la cita acompañados del actual administrador apostólico de Pamplona, Francisco Pérez (arzobispo de Pamplona y Tudela hasta el pasado 9 de noviembre). 

La ceremonia, que dará comienzo a las 11 horas en la catedral de San Antolín, contará con la participación del nuncio del Papa y con la presencia de una treintena de obispos. A pesar de no haber confirmación oficial, desde la diócesis se espera la asistencia de todos los de la región, así como de los naturales de Palencia que se encuentren en otras zonas geográficas y los que anteriormente han presidido el palacio episcopal de la provincia. En total, la seo palentina acogerá alrededor de 2.000 asistentes. 

LA CEREMONIA. El acto de ordenación y toma de posesión contará con tres grandes momentos, que se desarrollarán en el crucero de la catedral. El primero de ellos será el saludo del actual administrador apostólico, Manuel Herrero, obispo de Palencia desde 2016 hasta el pasado 31 de octubre. Tras la lectura de los evangelios, tomará la palabra el nuncio con su homilía. Por último, con el rito de la ordenación completado y después de la comunión, Mikel Garciandía se dirigirá por primera vez a los palentinos como nuevo obispo. 

El sacerdote navarro, siguiendo con el protocolo para este tipo de actos, llegará a la catedral por la puerta del Obispo, donde será recibido por el cabildo. Después, se dirigirá a la capilla del Sagrario y, a continuación, a la sacristía para revestirse y dar así comienzo a la celebración de entrada. En este caso, a diferencia de su predecesor, Garciandía acudirá con las vestiduras de obispo. Hay que recordar que Manuel Herrero, en su toma de posesión el 18 de junio de 2016, acudió con el hábito agustino de color negro en honor a su orden, el mismo que vistió cuando le recibió el Papa Francisco. 

El coro de la catedral estará casi al completo debido a la participación de tres corales: la Capilla Clásica de la seo, el coro Regina Angelorum (Grijota) y la coral de Echarri-Aranaz, pueblo del que es natural el nuevo mitrado. 

Según ha podido saber este rotativo y siguiendo con las costumbres de anteriores obispos, se espera que Garciandía  pase unos días en el monasterio de San Isidro (llamada también La Trapa), en Dueñas.

Para aquellos que no puedan asistir a la seo palentina, el acto será retransmitido de forma simultánea por La 8 Palencia y 13tv, esta última con una cobertura a nivel nacional. Asimismo, durante la celebración de la eucaristía habrá cuatro pantallas, las cuales estarán situadas en la puerta de la sacristía, las proximidades del claustro, el trascoro y la girola.  

El futuro prelado se despide del santuario de San Miguel de Aralar

Mikel Garciandía fue nombrado por el Papa nuevo obispo de Palencia el pasado 31 de octubre, tomando de esta manera el relevo de Manuel Herrero. Desde ese momento, supo que su vida como capellán del santuario de San Miguel de Aralar, en la localidad de Huarte-Araquil, en Navarra, llegaba a su fin después de década y media. 

El pasado domingo ofició su última misa en la que fue su casa durante casi 15 años, desde el 24 de junio de 2009. Esta eucaristía fue bastante accidentada debido a los 40 centímetros de nieve y a los atascos que se formaron, lo que obligó a retrasarla por casi dos horas, según informó Noticias de Navarra.

Un pedazo de la cofradía de San Miguel acompañará al que será prelado de Palencia desde este sábado. El presidente de la cofradía, Joxe Mari Ustarroz, le impuso la cruz pectoral y le entregó una txapela (las boinas populares de Navarra y el País Vasco) como recuerdo. 

«Me voy con la pena que supone la desvinculación con las personas y los proyectos, pero con la certeza de que no habrá una ruptura radical», manifestó Garciandía en su despedida, según recogió Noticias de Navarra.