El carbón es mucho más que una simple piedra de color negro que produce calor. Es una forma de vida que transformó para siempre la Montaña Palentina, a la que trajo riqueza y prosperidad en forma de trabajo duro bajo tierra y sacrificio. Es un sentimiento que perdura en el presente a pesar de que las minas dejaron hace años de funcionar en la cuenca y de aquellos años de gloria solo quede el recuerdo.
Así quedó demostrado ayer, festividad de Santa Bárbara, en los pueblos ligados a esta actividad industrial que vio la luz en el norte de Palencia en los confines del siglo XIX. Más de 180 años en los que la patrona ha protegido a los mineros en el tajo, fuera de la bocamina y también en la actualidad, como pudo comprobarse en localidades como Guardo, Velilla del Río Carrión, Santibáñez de la Peña, Castrejón de la Peña o Barruelo de Santullán, donde cientos de vecinos tomaron parte de los actos conmemorativos en torno a la Santina.
GUARDO
El punto de partida en Guardo fue la misa cantada por la Coral Boardo en la iglesia de Santa Bárbara, cuya talla titular lucía su nuevo aspecto tras la limpieza a la que se ha sometido a la escultura de piedra hace unos días. Tras la ceremonia, llegó uno de los momentos más emocionantes de la jornada: la procesión hasta el Monumento al Minero, donde tuvo lugar la ofrenda floral en recuerdo de los que ya no están y se entonó el Santa Bárbara Bendita.
El carbón, siempre presenteEl Club de Entibadores fue el encargado de portar provistos con la ropa del trabajo esta talla reducida en dimensiones pero grande en lo que entraña, con valores como el compañerismo, la solidaridad o el trabajo en equipo. Allí se dieron cita compañeros de fatigas, familias y amigos para dar cuenta de un programa que continuó con una comida de convivencia y sendos homenajes a Jesús Vega (minero de mayor edad de localidad) y Agripina Fernández, socia más veterana del centro de día.
Previamente se inauguró la exposición Los oficios mineros, que puede visitarse en el auditorio hasta el 20 de diciembre a modo de homenaje a los vecinos que dedicaron su vida a la minería y de legado para las futuras generaciones. En ella, los asistentes pueden sumergirse en un viaje al pasado visitante la carpintería, la lampistería, la fragua, el botiquín o el economato.
VELILA, SANTIBÁÑEZ Y CASTREJÓN
El carbón, siempre presenteEn Velilla, última localidad en desvincularse del carbón tras el cierre de la térmica, se siguió similar patrón. Así, la iglesia del Salvador fue el punto de partida con una misa cantada por la Coral La Reana. Después, el homenajeado este año fue José Vejo.
La comarca de La Peña festejó SantaBárbara por partida doble. En Santibáñez, los actos arrancaron con misa en Las Heras y continuaron con una traca y un vino español en la plaza del Ayuntamiento. Ya por la tarde, se rindió homenaje al minero más veterano (Alejandro Loma), se proyectó un documental y se ofreció una chocalatada. En Castrejón, hubo celebración religiososa, procesión y comida de hermandad.
BARRUELO
El carbón, siempre presenteMención especial merece Barruelo, única fiesta de Santa Bárbara de interés turístico regional. Un marchamo del que presume desde febrero de 2022 que se traduce en una programación extensa durante ocho días. Como elemento diferenciador, destaca la Procesión de las Antorchas, que se celebra, a oscuras, de noche, la víspera de la celebración de la patrona, haciendo de este uno de los actos más entrañables en memoria delos mineros que dejaron su vida en las entrañas de la tierra.
El carbón, siempre presenteEn Vallejó de Orbó habrá que esperar hasta el sábado para su procesión de Lámparas y Antorchas. Además, no faltará la misa minera, sopas de ajo, vino, mistela y tortas.