La irregularidad es lo que ha marcado la suerte de los palentinos en el Sorteo de Navidad del 22 de diciembre. Si bien a finales del siglo XX y comienzos del presente las bolas de los bombos eran más generosas, los últimos años no han sido los mejores para los vecinos de capital y provincia.
Si hay un año que permanecerá por siempre en la memoria palentina es, sin duda, el 2006. Aquella mañana, los niños de San Idelfonso entonaron sus cuerdas vocales para anunciar a viva voz que el 47.272 era el cuarto premio. Nada menos que 100 series fueron repartidas por la administración de loterías número 3 de la capital, lo que se tradujo en 20 millones de euros. Casi nada. Los trabajadores de la empresaHormigones Saldaña fueron los que más alegría se llevaron, pues más de la mitad de las series eran suyas. Ha sido el sorteo que más dinero ha dejado en la provincia en toda su historia. Por si fuera poco, la administración número 9 repartió también una serie con el quinto premio, el 27.274.
Otra mañana memorable fue la de 1996. Por aquel entonces, el Centro Asistencial San Telmo se llevó 40 series del tercer premio, nada menos que 2.880 millones de pesetas (unos 17 millones de euros) gracias al 56.690, consignado por la administración número 6 de la capital.
Dos años antes, en 1994, Paredes de Nava también descorchó el champán con motivo de las 2.160 millones de pesetas que repartieron las 30 series con el tercer premio, en uno de los días más recordados para los paredeños. En este caso, el 23.040 fue el agraciado. Por aquel entonces, pocos fueron los vecinos que se quedaron sin su pellizco, pues 723.000 pesetas fueron repartidas por la Cofradía del Santo Cristo en participaciones de 200. Por otro lado, el colegio público Alonso Berruguete repartió 350.000 pesetas, y los 55 décimos restantes fueron vendidos directamente por la administración de loterías de la localidad.
EL GORDO. El Gordo no se ha dejado apenas ver por la provincia. Después de tantos años de sorteos, el primer premio solo ha caído en los bolsillos de los palentinos en seis ocasiones, incluyendo la del presente año. En 2010, la administración número 1 de Saldaña vendió una serie del Gordo en ventanilla con el 79.250. Sin embargo, la alegría no se quedó en la comarca de La Vega, pues nadie reclamó el premio (o, por lo menos, no lo hizo público), lo que dejó la creencia de que los agraciados eran turistas que estaban de paso.
En 2013, otra serie del Gordo cayó en la capital, en este caso, gracias al 62.246.
Si bien el 2004 no fue el año con más suerte para las administraciones locales, sí lo fue para María del Carmen Sanz, una vecina de Villamuriel de Cerrato que se vio recompensada con el primer premio del 54.600. Esta mujer, de por aquel entonces 60 años, compró el décimo en la administración de lotería La bruja de Sort, en Lérida, a través de Internet.