Cada 12 de mayo, en todo el mundo se conmemora el Día Internacional de la Enfermería, y en este contexto, según la información facilitada por Satse, en el capítulo de plantillas, harían falta unas 240 enfermeras en Palencia entre Primaria y Especializada, según un estudio que hizo el sindicato antes de la pandemia. 

«Este número en la actualidad se queda corto, porque hemos pasado a la jornada de 35 horas, porque la media de edad de las enfermedad va siendo alta y tienen sus días de descanso y por antigüedad. Además, se han incrementado las competencias y funciones que podemos hacer porque  en estos momentos hay falta de otros profesionales», afirma la secretaria provincial, Sonia Pascual, quien añade que «si se incrementaran las plantillas en 240 enfermeras, la situación sería bastante más holgada y, probablemente atenuaría los problemas de falta de profesionales que se dan en momentos puntuales como pueda ser en verano». 

En este sentido explica que «es cuando la bolsa se queda sin candidatos», y por qué, y es otra reclamación que hace Satse. La respuesta es que «habría que incrementar el número de plazas en las escuelas de Enfermería, mejorar las condiciones laborales y de conciliación en Castilla y León para que no se marchen a otros países o prefieran otras comunidades y que se fidelice en los contratos, que se procure sean largos y que permita que a los profesionales les guste estar aquí».

En cuanto a la reivindicación «más clara», Pascual hace hincapié en el «reconocimiento» de lo que hacen y para qué sirve la enfermera. «En  la web de Satse -comenta- pueden verse videos en los que las enfermeras expresan en cada puesto las funciones que desarrollan y cuentan lo que hacen para que la ciudadanía no nos equivoque con cualquier otra categoría profesional». Y es que «al haber falta de profesionales, muchas de nuestras funciones se quieran adjudicar a otros  u otros se las quieran adjudicar», indica. Otra queja que expone la secretaria provincial de Satse es que las enfermeras, «con la titulación que universitaria que tenemos, sigamos estando en una clasificación profesional inferior que no nos permite acceder a los puestos de dirección y gestión». 

Satse reclama la aprobación de Ley de seguridad del paciente, una iniciativa del sindicato que establece que, en los hospitales, como regla general, haya un máximo de seis pacientes por cada enfermera, pudiéndose asignar hasta ocho, y, en los centros de salud, la asignación de población por cada enfermera o enfermero no deberá superar nunca los 1.500 habitantes. «Se trata de una proposición para que las plantillas estén bien dimensionadas y que se pueda trabajar en una situación en la que prestar un servicio de  la máxima calidad en condiciones de seguridad!», asevera Pascual. 

El sindicato señala también en el capítulo de reivindicaciones que se pueda acceder a la jubilación anticipada voluntaria, dado que  es «una profesión muy difícil y que se ejerce en una condiciones, con turnos o el manejo de medicamentos peligrosos, se ha demostrado que con el tiempo se manifiestan enfermedades».

diferencia. Satse pone el foco este año, con motivo del Día Internacional de la Enfermería, en que la creciente evolución y diversificación de responsabilidades de estas profesionales sanitarias ha hecho posible que su trabajo «marque la diferencia» en la mejora de la salud de las personas.  Marcamos la diferencia es el lema escogido por el sindicato para generar conciencia social sobre el trabajo real que las enfermeras desarrollan, en la actualidad, dentro del sistema sanitario y la comunidad. 

impacto.  Desde el Colegio Oficial de Enfermería de Palencia, la  presidenta saliente, Carmen Bárcena (y es que el 17 de mayo tomará posesión del cargo Patricia Pérez) señala respecto a la ratio de enfermeros por paciente  que «después del covid y con las nuevas jubilaciones estamos peor, por debajo de las necesidades de cobertura de la población», para hacerse eco  a renglón seguido del lema propuesto por Consejo Internacional de Enfermería, que invita a reflexionar sobre el impacto económico de esta profesión. «A menudo, la enfermería se enfrenta a limitaciones financieras y a la infravaloración social, a pesar de ser la columna vertebral de la asistencia sanitaria. Es crucial, por este motivo, reconocer el valor económico que aporta la enfermería a la sociedad, no solo en términos de atención directa a los pacientes, también en la promoción de la salud, la prevención de las enfermedades que significa una reducción de costos a largo plazo», manifiesta.

Carmen Bárcena, que incide en que los colegios de Enfermería protagonizan en Castilla y León un papel esencial en la promoción y defensa de las competencias profesionales de este colectivo, subraya que «surgen nuevos desafíos y amenazas», y cita en este sentido «la creciente falta de personal y las dificultades que añadirá a la estabilidad en las plantillas la inminente jubilación de promociones de enfermeras muy numerosas». 

En este Día Internacional de la Enfermería, el colegio oficial palentino es  uno más de los que reafirma su compromiso con esta profesión, resalta el poder económico de los cuidados y compromete su esfuerzo para que la enfermería sea valorada y reconocida, también por los gobernantes en Castilla y León, como «fuente de riqueza económica y de salud para la sociedad a la que servimos».

Bárcena mostró la preocupación por los servicios sociosanitarios, «y más cuando no tenemos enfermeros en los centros geriátricos, además las ley no los contempla».  «Hay que pensar en lo que se nos viene encima, que son las jubilaciones, y para esto no estamos preparados. No damos cobertura seguro», concluye.