El presidente de la empresa agroalimentaria Cascajares, Alfonso Jiménez, presentó hoy en Valladolid el proyecto Ave Fénix, la iniciativa solidaria con la que la empresa pretende devolver a la sociedad todo el cariño recibido después del incendio que redujo a cenizas su sede de Dueñas el pasado 26 de enero. Ave Fénix nace de la adversidad y el agradecimiento de Cascajares al decidido apoyo, el gran cariño y la enorme confianza en la recuperación que la sociedad, volcada en ayudar a la empresa en sus peores momentos, transmitió nada más ocurrir la desgracia.
Alfonso Jiménez explicó los detalles del proyecto y puso como ejemplo la llamada del prestigioso chef José Andrés, quien desde un primer momento ofreció su ayuda a la empresa palentina. El cocinero asturiano, Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2021 por su labor solidaria en todo el mundo con su ONG World Central Kitchen, se sumó a la causa regalándoles la receta de la pularda Ave Fénix que, además de simbolizar la resiliencia, el renacer y el espíritu de superación de la compañía, refleja el firme compromiso solidario de Cascajares con la reconstrucción de la Sierra de la Culebra en Zamora, arrasada en 2022 por dos de los mayores incendios de la historia de España y que afectaron a un total de 57 municipios; una tragedia con la que se sienten plenamente identificados.
Así, por cada pularda Ave Fénix vendida, la empresa plantará un árbol en la zona. La suma de todos ellos dará como resultado la creación del Bosque Cascajares. La compañía palentina hace extensible de esta manera a toda la sociedad su sensibilidad hacia un territorio en el que Cascajares encuentra muchos puntos en común. Una tierra a la que desea insuflar ánimo y servir de referente de la capacidad para salir adelante incluso cuando la adversidad se ceba con aquello que más quieres. Hoy, nueve meses después de los peores días de su historia, Cascajares trabaja de nuevo al ritmo habitual, recoge miles de encargos para la próxima Navidad y lleva a orgullo el hecho de haber sabido mantener cerca, «a pesar de las circunstancias», a las personas que forman su equipo. «Son los principales artífices de nuestra recuperación, un ejemplo de paciencia, fidelidad y esfuerzo», explicó el presidente de la empresa.
GRATITUD POR EL APOYO
Jiménez ahondó en los agradecimientos por el apoyo recibido y explicó que a Cascajares «no se le ocurría mejor forma que esta para devolver todo lo que nos han dado proveedores, clientes, particulares e instituciones, comenzando por la Casa Real», una referencia a la recepción que el Rey Felipe VI concedió a una representación de la empresa tan solo unos días después del accidente. Los capones de Cascajares fueron parte esencial del menú de la boda del Monarca con la Reina Letizia, de la que en 2024 se cumplirán 20 años.
Ave Fénix representa un nuevo capítulo en la historia de Cascajares, marcada por la voluntad de dar un paso adelante, el afán de superación y la intención de ser un actor influyente en su entorno, donde ya deja huella, especialmente en el capítulo de la integración de personas con capacidades diferentes, un aspecto en el que se trabaja principalmente desde la Fundación Cascajares.
En la presentación de esta idea solidaria también participó Narciso Prieto, director ejecutivo de la Fundación Caja Rural de Zamora, quien remarcó el orgullo de la entidad «de ser parte de este proyecto que no es solo un producto fantástico, es una forma de ser y de hacer de la que nos sentimos orgullosos. Sabemos el esfuerzo que ha costado todo esto y para nosotros estar al lado de Ave Fénix es un orgullo».
En esa misma línea se manifestó María Eugenia Clemente, directora general de Aciturri Aeroestructures, quien personificó la recogida del guante solidario lanzado por Cascajares al convertirse en la primer gran compañía que apuesta por Ave Fénix. 3.000 árboles se plantarán en la Sierra de la Culebra gracias a esta empresa de origen burgalés que comprendió desde el principio el papel esencial que las empresas juegan para que Ave Fénix vuelva a teñir de verde y vida este enclave zamorano. «El regalo de Navidad de Aciturri a toda nuestra plantilla será la pularda Ave Fénix, que transmite los valores de la empresa familiar: sacrificio del empresario por hacer sostenible su proyecto, esfuerzo por adaptarse a los acontecimientos y compromiso con la empleados y la sociedad», señaló.