Chocolates Trapa cerró 2024 con un crecimiento «histórico», alcanzando una facturación de 61,6 millones de euros, un 57% más que en el ejercicio anterior. Gracias a su estrategia de diversificación de productos y canales de distribución, así como al alto nivel de ocupación de su fábrica (actualmente en un 60%), la compañía se encuentra en un punto de viabilidad económica y financiera, a pesar del desafiante contexto de alza en los precios de las materias primas derivadas del cacao desde 2023.

Desde que en 2013 tomara las riendas una nueva propiedad -de capital 100% español-, la chocolatera palentina ha experimentado un crecimiento a doble dígito año tras año y se espera que este impulso continúe con fuerza en los próximos. 

Mientras que en ese año la facturación apenas alcanzaba 1,5 millones de euros, en 2024 ha superado ampliamente sus expectativas de ingresos facturando más de 61 millones de euros y prevé cerrar 2025 con 75 millones de euros en ventas y alcanzar los 100 millones en 2027, según su CEO y presidente, Gerardo Fernández. «Hoy somos un motor económico para nuestra región, contribuyendo a fijar población y generando empleo estable. Contamos con un equipo de 168 trabajadores durante todo el año, que se amplió hasta 220 empleados en la última campaña navideña», aseguró.

NOVEDADES. La marca ha introducido cambios significativos en sus fórmulas y ha ampliado su porfolio en los últimos años. 

Especialistas en el segmento de chocolate negro y sin azúcar, para este año, la empresa palentina presentará varias novedades clave: mini cookies de cortesía para reforzar su presencia en el canal horeca, dos nuevas referencias de tabletas que completaran su gama Collection, un formato de chips para repostería y un innovador chocolate a la taza en brik, que podrá consumirse tanto frío como caliente, fruto de una alianza con la lechería zamorana Gaza. 

Esta sinergia demuestra a su vez la apuesta de Trapa por la innovación y el aprovechamiento de sinergias locales para ofrecer productos de excelencia.