Adentrarse en el territorio del oso pardo en Cervera de Pisuerga, deslumbrarse con los paisajes de la Sierra del Brezo en Santibáñez de la Peña, contemplar desde la ventana a su paso por Guardo picos emblemáticos de la Montaña Palentina como el Espigüete, viajar hasta la época clásica en la Villa Romana La Olmeda o hacer un pequeño tramo del Camino de Santiago a su paso por Carrión de los Condes. Estos son algunos de los caprichos que pueden darse quienes viajan a bordo del Expreso de La Robla, un hotel de lujo sobre raíles que desde su puesta en funcionamiento en 2009 permite conocer la provincia de una forma única y diferente en un trayecto de tres días y dos noches entre Bilbao y León a un precio de 1.150 euros por persona en compartimento doble.
Confort, gastronomía y un servicio de alta calidad son las claves de este tren clásico que sigue el trazado del antiguo Hullero en un viaje irrepetible que recorrió los paisajes más espectaculares del norte de Castilla y León y Vizcaya con cuatro salidas durante este 2024 y que ha bierto ya las reservas para la temporada de 2025.
Los itinerarios de las excursiones que se realizan son elegidos y explicados en diversos idiomas por guías profesionales, y para poder acceder a los distintos lugares del trayecto, en paralelo al tren circula un autocar (caso de La Olmeda o el Camino) que recoge a los viajeros cuando la visita programada requiere un desplazamiento por carretera. Con esta ruta, los clientes pueden conocer enclaves naturales y disfrutar de los atractivos turísticos, culturales y gastronómicos.
NUEVE COCHES
El Expreso de La Robla consta habitualmente de nueve coches: tres de salón, cuatro de cama, un furgón de energía y un coche de servicio. Así, el interior se distribuye en 27 cabinas de 3,42 metros cuadrados con cuarto de baño propio (provisto de ducha, lavabo, inodoro y secador de pelo) y armario ropero, hilo musical, climatización y telefonía, entre otras comodidades.
A su vez, los salones comunes disponen de servicio de bar permanente y amplios ventanales desde los que disfrutar del paisaje. En esos mismos salones se sirve el desayuno todas las mañanas, antes de iniciar cada etapa del viaje, y en ellos se puede pasar el tiempo libre leyendo la prensa diaria, las revistas o algún libro de nuestra biblioteca. También cuenta con televisor y videoteca al servicio del pasaje.
Asimismo, el Expreso de La Robla detiene su marcha durante la noche y pernocta en alguna de las estaciones del recorrido. De esta forma, se da la posibilidad a los clientes de disfrutar un sueño reparador, mientras que otros muchos apuestan por disfrutar del ocio nocturno en las ubicaciones en las que el convoy hace parada.
Por otro lado, destacar que este tren es uno de los cuatro servicios turísticos de Renfe, entre los que destaca el Transcantábrico Gran Lujo, que también ha recorrido temporadas pasadas la Montaña y ahora viaje por Asturias, Cantabria y Galicia. Los otros tres son el Andalus y el Costa Verde Express.