UGT-Servicios Públicos denuncia el «desmantelamiento» del servicio de bibliobuses en la provincia, dependiente de la Junta y la Diputación. Según advierte el sindicato, la situación ha llegado a un punto crítico, con los conductores «sin cobrar sus nóminas en lo que va de año» y «dos de los tres vehículos inoperativos». UGT señala que uno de los bibliobuses no ha pasado la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) porque la administración no ha asumido el coste del cambio de ruedas, mientras que otro no puede circular porque su seguro ha caducado. Además, el suministro de combustible tampoco se está cubriendo, lo que deja a un solo vehículo en funcionamiento para atender toda la provincia.

El sindicato también denuncia que uno de los tres puestos de trabajo en el servicio permanece sin cubrir desde la jubilación de un trabajador el pasado 3 de diciembre. «Ni se cubren bajas ni se atienden los gastos esenciales para el funcionamiento del servicio», critica UGT, que recuerda que esta no es la primera vez que los empleados sufren retrasos en el pago de sus nóminas.

Desde la organización sindical consideran que esta situación responde a una intención de «desmantelar» el servicio, a pesar de que tanto la Junta como la Diputación lo han calificado como «fundamental para el desarrollo de la vida en los pueblos». UGT ha iniciado acciones judiciales y exige una solución «inmediata y definitiva».

Por su parte, desde la Diputación, la diputada de Cultura, Carolina Valbuena, quiso dejar claro que «no gestiona dicho servicio, si bien se ha implicado en todo momento en su continuidad», e informaba de que ha realizado aportaciones económicas con un montante de más de 650.000 euros en los últimos cinco años. «Compartimos nuestra preocupación por las incidencias que están afectando al servicio de lectura en nuestros pueblos», aseveraba la diputada provincial.