Una profesora palentina 'tumba' la oposición de catedráticos

Alberto Abascal
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La sentencia anula el proceso selectivo para 200 plazas convocado por la Consejería de Educación al entender que la prueba del proyecto de los aspirantes no se ajusta a derecho

Una profesora palentina ‘tumba’ la oposición de catedráticos

Una docente palentina ha conseguido que la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) haya anulado la convocatoria ofertada por la Junta de 200 plazas de catedráticos de Enseñanza Secundaria, al considerar el tribunal que dicha convocatoria no se ajustó a derecho en cuanto a la baremación como mérito del proyecto elaborado por los aspirantes.

La sentencia, a la que ha tenido acceso Diario Palentino, condena a la Consejería de Educación a reponer las actuaciones al momento de calificación de méritos de los concursantes para que se proceda a realizar un nuevo cálculo de sus correspondientes puntuaciones, con la eliminación de la otorgada por la ejecución del indicado proyecto y que se proceda a realizar las nuevas adjudicaciones de plazas resultantes tras las nuevas futuras calificaciones.

LOS HECHOS. Los hechos juzgados, que ya son firmes, se remontan a enero de 2020 cuando la Consejería de Educación de la Junta convocó un procedimiento de acceso al cuerpo de catedráticos de Enseñanza Secundaria con un total de 200 plazas.

La legislación aplicable a las convocatorias para el acceso este cuerpo es un Real Decreto del año 2007 donde se establece que el procedimiento consistirá en un concurso de méritos en el que se valoran los méritos que el aspirante posee en su haber hasta la fecha de fin de plazo de presentación de solicitudes.

La Consejería, en las bases incluyó una prueba que denomina proyecto, que consiste en un trabajo que se realiza durante el proceso selectivo y que luego hay que defender oralmente ante un tribunal. Inicialmente, a ese proyecto le otorgan una puntuación de 0,15 puntos, y, posteriormente en una corrección de errores se le asigna una calificación máxima de 1,5 puntos, que comparado con el resto de los 38 apartados del baremo, «resulta totalmente desproporcionada y subjetiva; penaliza enormemente los restantes méritos profesionales y académicos que poseen los aspirantes y limita la objetividad en el acceso a la función pública. Además, es la última prueba de todo el proceso selectivo, con una puntuación desmedida, que se valora cuando ya se conocen los méritos definitivos de todos los aspirantes y que resulta que es la decisoria de la cátedra». 

«Se  observa que ninguna de las otras comunidades autónomas que han convocado un procedimiento de acceso al cuerpo de catedráticos incluye una prueba similar. Esta es una convocatoria contraria al Real Decreto de 2007», explica la demandante a Diario Palentino», añade.

CONFINAMIENTO. Por ello, en vista del proceso seguido por la Consejería, esta profesora palentina, en marzo de 2020, en pleno confinamiento, impugnó las bases, y, posteriormente, acudió a la letrada del sindicato UGT, Inés Muñoz Díez, para que recurriera ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León dicha convocatoria. A partir de aquí, la sala de lo contencioso-administrativo del TSJCyL le dio la razón a la demandante, por lo que ha decidido anular esta prueba del procedimiento.  La resolución establece de manera sucinta que, «lo que no puede hacer la administración es trocar el sistema y pasar de una baremación de méritos existente en quien interviene a un procedimiento selectivo de personal y establecer, dentro del mismo, un mecanismo de realización y valoración exnovo de méritos que se establecen en la normativa».

«La sentencia es muy clara; y exijimos que se cumpla. La Consejería de Educación debe nombrar a 200 catedráticos sin el proyecto, tal y como han determinado en la sentencia el alto tribunal de la región»,según  indica la profesora palentina a este periódico.