A muchos palentinos, el nombre Erasmus (desde hace unos años con el símbolo + adjunto) quizá le recuerde más al conocido programa de intercambio de universitarios, pero también es la denominación del sistema que permite a alumnos y profesores de colegios e institutos de la provincia viajar a otros centros europeos y recibir a compañeros procedentes del viejo continente.
Según la Junta de Castilla y León, al menos una decena de instituciones educativas de la provincia cuenta con la acreditación Erasmus. En el listado aparecen colegios de Educación Primaria como el Modesto Lafuente; institutos de Educación Secundaria,Bachillerato y FormaciónProfesional (Santa María laReal, Jorge Manrique, Virgen de laCalle y Guardo), centros concertados como el SanGregorio, instituciones de educación no obligatoria (Conservatorio de Música y Escuela de Idiomas) y de formación para adultos (SanJorge). Y tal como cuentan desde varios puntos de la geografía palentina, se suman a esta iniciativa porque es positiva tanto para los jóvenes como para los docentes que participan en estas actividades. En la mayoría de los casos hablan maravillas del Erasmus+.
«Con este programa abrimos una ventana al mundo para que los estudiantes puedan abrir, en el futuro, una puerta.Pienso que es una experiencia muy enriquecedora para ellos», afirma Marisa Fernández, la coordinadora de Internacionalización del instituto Santa María la Real de Aguilar de Campoo.
Desde el centro hace años que apostaron por ese programa continental y en este curso organizaron un intercambio de larga duración y dos jóvenes de 15 años que estudian cuarto de ESO en el instituto galletero pasaron aproximadamente un mes en invierno estudiando en la localidad siciliana de Scordia y otros dos italianos se encuentran actualmente en Aguilar. «La alumna que participó asegura que ha sido la mejor experiencia de su vida», explica Fernández. Este plan, que era la gran novedad del instituto, se suma al programa de convivencia de una semana por el cual 18 estudiantes aguilarenses de tercero de ESOse desplazaron recientemente a la ciudad alemana de Ubach Palemberg y también al viaje de más de 20 alumnos de primero y segundo de Secundaria a un municipio muy cercano a Amiens (Francia). En ambos casos, se trata de una experiencia de corta duración. Además, un profesor se trasladó a hacer una observación en el aula a Sicilia. En lo referente a la educación superior, docentes realizaron otras dos observaciones en Portugal y Malta.Por último, en el país del centro del Mediterráneo hay cuatro estudiantes del grado superior de FP de Administración de Empresas cursando sus prácticas.
Al sur de la provincia, el instituto Recesvinto de Venta de Baños se encuentra inmerso en este programa financiado por la UniónEuropea. Recientemente, organizaron unas jornadas sobre convivencia y salud en el que participaron dos expertos de Italia y profesores y alumnos del IES Maestro Haedo de Zamora. Además, once alumnos y dos profesores venteños viajaron gracias a una movilidad escolar a Brescia (Italia), mientras que los estudiantes transalpinos visitarán la localidad ferroviaria en mayo. «El proyecto Erasmus+ iniciado este curso ha supuesto un gran paso para la mejora de la calidad educativa, ya que, además de conseguir la internacionalización del centro, se ahonda en los valores de inclusión, diversidad e igualdad», manifiesta la directora del centro,BlancaRuiz.
En la capital, un grupo de alumnos del colegio Nuestra Señora de laProvidencia viajó a Colonia (Alemania) durante una semana.«El objetivo de la actividad era compartir un proyecto de aprendizaje cultural que se ha llevado a cabo con éxito. Ha resultado muy enriquecedor a nivel cultural», declaran desde el centro.
Por su parte, el colegio Santo Ángel participa desde este curso en el programa Erasmus+ y se ha asociado con un centro de Ptolemaida, una ciudad del norte de Grecia cercana a Tesalónica. «Los alumnos hicieron un estudio de la biodiversidad de Palencia y otras actividades, como una ecoauditoría, y se las hemos trasladado a ellos», según detalla la profesora Noemí Pérez. Por ello, cinco estudiantes de segundo de 13 y 14 años y la docente viajaron durante cinco días a laRepública Helénica. «La experiencia fue maravillosa y superó todas las expectativas que teníamos con creces», declara Pérez. De hecho, tienen previsto ya que, en la próxima movilidad, viajen otros cinco jóvenes a un lugar diferente.