«No sabemos distinguir entre lo que es real y lo que no»

Pablo Torres
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El mago Dakris regresa hoy, a partir de las 19,30 horas, al Teatro Ortega, con su espectáculo 'iReality'. A través de diferentes juegos, ilusiones y desapariciones difuminará la delgada línea entre la realidad y las percepciones del público

Dakris, el mago invisible - Foto: DP

Ilusiones, desapariciones y una lucha constante para diferenciar lo que es real y lo que no es el pan de cada día para el mago David Vidal, conocido como Dakris. 
Este joven ilusionista ha provocado el asombro de miles de espectadores con sus juegos y trucos, tan impresionantes como inverosímiles, tales como la desaparición de la Sagrada Familia de Barcelona. Las variadas distinciones que ha recibido a lo largo de su carrera dan cuenta de su talento para la magia. 

Además, es uno de los rostros habituales en el Teatro Ortega, pues el de hoy es su cuarto espectáculo en la capital. 

Como mago, ¿considera a la magia un engaño?
La magia es el arte de engañar a la mente para hacerte creer que estás viendo algo que en realidad no estás viendo. No lo suelo ocultar. Yo creo la ilusión, no le digo a la gente que tengo poderes. Sabiendo esto, el público lo valora más. 

Dentro de la magia está especializado en el ilusionismo. ¿Cómo practica este tipo de espectáculos?
La manera de prepararlo es la misma que la magia, solo que, en lugar de un tapete y cartas para practicar, tienes un lugar de ensayo con grandes estructuras y ayudantes. 

Uno de sus trucos más célebres fue el de hacer desaparecer parte de la Sagrada Familia. Sin entrar en detalles sobre cómo se hizo para no desvelarlo, ¿se puede decir que tiene una explicación? 
Lo bueno del ilusionismo es que todo tiene una explicación. Si tú la sabes, se pierde la magia. Siempre hay alguien que debe saberlo. A algún familiar y gente de compañía les conté el secreto. 

¿Alguna vez le ha salido un truco mal?
Es algo que puede pasar. Lo bueno de la magia es que, aunque te salga un truco mal, el público no sabe cómo va a terminar el juego, por lo que puedes buscar otra salida. 

Actuar en una sala o teatro, ¿le limita o le ofrece más posibilidades?
Estar en un teatro siempre es mejor que verlo a través de un vídeo: el público lo valora más. Puedes jugar con la luz, la música, los efectos técnicos… Eso te da más posibilidades.

Asegura que en su espectáculo iReality llevará a los espectadores «a un mundo paralelo». ¿Cómo es ese mundo?
Siempre juego con tratar de cambiar el concepto de realidad. Va a haber un punto en el que te preguntes: ¿esto está pasando o es una ilusión?

Ha sido distinguido con multitud de reconocimientos, como el de Mago del Año en el Memorial Frakson de Madrid, tercer premio en el Congreso Internacional de Magia de Almussafes o el primer premio en el Congreso Mágico Nacional de Cádiz, por citar algunos. ¿Se considera la promesa de la magia en España?
Yo no me lo diría. Simplemente, soy una persona que lleva desde los 7 años en la magia. Es un trabajo pasional y eso se acaba notando en el teatro. 

¿Guarda un recuerdo especial de alguna colaboración?
Estuve trabajando tres años con Antonio Díaz, el Mago Pop. Estaba de asesor mágico: creábamos magia, nos reuníamos, aceptábamos juegos, rechazábamos otros… Es algo que te abre la mente. 

Ya que menciona su colaboración con el Mago Pop, ¿considera que está siguiendo sus pasos?
Es un referente, y trabajar con una persona que admiras es bueno. 

Antes que él hubo más. Con 7 años, por ejemplo, mi referencia era David Copperfield, al que todavía sigo sus pasos. Ha habido otros como Juan Tamariz, Jorge Blass y su espacio Magiatrix, el programa Nada x aquí, etc. 

La magia en televisión siempre ha sido acusada de ser manipulada. Ya que usted ha trabajado en programas como El Hormiguero, ¿desmiente ese mito?
Siempre vas a creer que lo que ves en la televisión es mentira. Por eso es mejor ir a ver los espectáculos en directo.

 Estamos en un mundo, y más ahora con la inteligencia artificial, en el que no sabemos distinguir entre lo que es real y lo que no, pero en esa duda está la magia. 

¿Tiene en mente un nuevo truco?
Lo único que puedo decir es que me encantan las desapariciones y las teletransportaciones.