El Súper Agropal Palencia Baloncesto conseguía ganar en Donosti en un encuentro muy disputado en el que, aunque casi siempre gozó de pequeñas ventajas, le tocó sufrir hasta el final después de que Inveready Gipuzkoa Basket se pusiese por delante en el último cuarto. Aguantaron en los malos momentos los de Luis Guil, que acabaron imponiéndose en un final de infarto y pizarras. Otro más, y es que entre un parón y otro, cuando se han disputado cuatro partidos, el conjunto morado se ha abonado al sufrimiento final, con cuatro resultados que se han decidido por dos o menos puntos (tres victorias y una derrota).
Comenzaba el encuentro con igualdad máxima, y aunque los palentinos se adelantaban una y otra vez, el equipo local no daba tregua (7-7, minuto tres). Sin embargo, tras varios fallos de unos y otros, una pérdida de balón de los locales la aprovechaba Borg para contraatacar en velocidad y firmar un triple que lanzaba a los visitantes hasta los seis puntos de renta (7-12, minuto cuatro). Pero Gipuzkoa Basket apretaba y tras canasta y rebote defensivo se colocaba de nuevo a solo un punto (11-12). Habían conseguido los locales reajustar su defensa y Súper Agropal Palencia tenía muchos problemas para penetrar en la zona local, mientras, los de Donosti le daban la vuelta al marcador y se ponían por primera vez por delante, 13-12. La renta local llegaba a los tres puntos en el minuto siete (15-12). Les tocaba a los morados ir a remolque, aunque conseguían igualar el luminoso justo al final del primer cuarto (21-21).
Un triple de Manu Rodríguez volvía a colocar por delante a los colegiales en el inicio de un segundo cuarto, en el que continuaron los fallos en el lanzamiento de uno y otro equipo y las pérdidas de balón. Sin embargo, de ese ir y venir con demasiada precipitación por parte de ambos equipos, era Súper Agropal Palencia el que, mejor en el rebote, conseguía salir vencedor, volviendo a abrir una pequeña brecha en el electrónico (24-29, minuto 13). Dos tiros libres elevaban la renta visitante hasta los siete puntos (24-31), una ventaja que los de Luis Guil aguantaban hasta el ecuador del segundo cuarto (28-35). Apretaban los locales en busca de una reacción que llegaba a tres minutos para el descanso, cuando dejaban la diferencia visitante en solo tres puntos, obligando a Guil a pedir tiempo muerto (37-40). Conseguían los palentinos recuperar aire gracias al lanzamiento exterior y, con dos triples consecutivos, colocaban el 39-46.
Vuelve a salir cara en otro final de infarto - Foto: DPAguantaban los visitantes el arreón final de Gipuzkoa Basket para irse al descanso todavía con seis puntos de ventaja (42-48).
Un triple de Wintering daba el pistoletazo de salida al tercer cuarto y volvía a lanzar a los palentinos (42-51), pero a partir de ahí los donostiarras se enchufaban, apretaban en defensa y conseguían un parcial de 9-3 que les volvía a acercar en el marcador (51-54, minuto 22). Movía el banquillo Luis Guil y los suyos recuperaban la intensidad necesaria para cortar la reacción de los locales y recuperar terreno (51-59, minuto 25). Hacían la goma una y otra vez los locales, que conseguían llegar con vida al final del tercer cuarto (65-70).
Martínez y un tiro libre de Nicolau apretaban un poco más el electrónico al inicio del último cuarto (68-70). Sufría Súper Agropal Palencia, que veía como los locales empataban (70-70) antes de que Wintering consiguiese anotar los primeros dos puntos para los suyos en este cuarto (70-72). Igualaban de nuevo los locales ante un rival atascado y Luis Guil pedía tiempo muerto a 6'17 para el final (72-72). Pero su equipo no reaccionaba y dos tiros libres permitían a Gipuzkoa Basket colocarse por delante en el marcador (74-72). La precipitación se apoderaba de los morados, que tras varios errores veían como el rival se iba de cuatro puntos en menos de medio minuto (76-72). Pero reaccionaba Súper Agropal Palencia a base de defensa y conseguía volver a colocarse por delante a falta de 35 segundos para la conclusión (81-83). Igualaban los locales, pero un triple de Wintering ponía de nuevo por delante a los morados con 25 segundos por disputarse. Aranitovic apretaba el luminoso (85-86) y Palencia forzaba la falta para cerrar el partido desde la línea de tiros libres (85-87).