Los vecinos del Camino Viejo de Husillos, donde Adif está llevando a cabo la construcción de la pasarela ferroviaria denominada como salto del carnero, enmarcada en la mejora de la línea de alta velocidad a Cantabria en la zona norte de la capital, lamentan sentirse «indefensos ante tantos incumplimientos de palabra y requerimientos», como manifestaron a través de un comunicado.
En este sentido, los residentes de la zona critican el «incumplimiento por parte del Ayuntamiento» sobre la realización de riegos periódicos «para evitar molestias de polvoreras y sensación de ahogo en el ambiente». «Estos riegos no se están produciendo con la asiduidad establecida» y, cuando se realizan, «carecen de presión y van dejando charcos a su paso». Asimismo, recuerdan que en el vecindario viven niños y personas mayores.
Por otra parte, el colectivo vecinal subraya que «las medidas de protección no cumplen su objetivo, ya que no siempre evitan la proyección de materiales a la vía pública y a las viviendas».
Por último, reivindican que no quieren ser «guardinanes ni inspectores», e instan a las partes implicadas a tener una «mayor responsabilidad». De seguir así, anuncian que se verán«obligados a tomar otras medidas de presión».