El salón de actos de la Fundación Díaz-Caneja acogió ayer la entrega de los premios que concede la Escuela de Arte y Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales, entre ellos los Mariano Timón, galardones instituidos en el curso 1983-1984 que pretenden motivar a los alumnos toda vez que reconocen y valoran, tanto el esfuerzo como el trabajo bien hecho, a la hora de realizar y desarrollar creaciones de tipo artístico. El extraordinario, dotado con 1.200 euros y patrocinado por la Diputación, se otorgó a Axel Gendrau, estudiante de segundo de Ebanistería artística, por Demesa.
Con esta obra, el galardonado ha querido rendir un homenaje al coche DeLorean de la película Regreso al futuro. Con ese concepto como punto de partida, ha diseñado una mesa multifuncional -auxiliar, trabajo y puede utilizarse como elemento contenedor-. La pieza aúna la pasión de Gendrau por el trabajo con la madera y la carga conceptual en la que se asienta el proyecto.
Para Axel Gendrau, que trabajó en Siro, lo de la madera era una «afición-pasión», y hubo un momento en el que decidió «dar el salto», estudiar Ebanistería artística en la Escuela de Arte Mariano Timón y labrarse un futuro en algo que le gusta. Se mostró «contento» de haber sido merecedor del premio. A su jucio, Demesa, de «aspecto midcentury, es una belleza; algo que hace años no pensaba que pudiera hacer». «Me alegra que se quede en la escuela, que se pueda ver y alguien piense en hacer el ciclo para hacer algo así», señaló. Asimismo, explicó que en capítulo de materiales para realizar esta mesa, empleó «una madera de Indonesia muy rara de encontrar ya, ramín, y mongoy, que ahora tampoco es fácil de conseguir. La combinación de los dos tonos le da cierto atractivo».
Como plan de futuro, la idea de Axel Gendrau es montar su propio taller, en principio «en el entorno rural», comentó. «El tiempo lo dirá», subrayó.
En esta edición de los Mariano Timón (distinción que rememora la figura del que fuera director de la escuela en el período comprendido entre 1940 y 1975), también se entregaron premios a Jorge Aristín, del Bachillerato de Artes, por la fotografía Realidad transformada; a Rocío Gil Gutérrez, de Joyería artística, por unos gemelos automáticos; a Javier Perafán, de Ebanistería artística, por Aromas de madera y café; a Alicia Prieto, de Ilustración, por El gato sonriente; a Inés Arija, de Arquitectura efímera, por Virago; Ana López y Mario Sánchez, de Conservación y Restauración de Bienes Culturales -especialidad Textiles-, por La cara efímera del tejido.
La escuela también concede el premio Carmen Trapote, implantado el curso 2006-2007 como homenaje a esta catedrática de Historia del Arte, profesora del centro desde 1965 y secretaria del mismo hasta junio de 2003 (casi 28 años). Esta distinción reconoce y valora a los mejores alumnos de cada promoción. Así, se premia con 1.000 euros, aportados por el Ayuntamiento, el mejor proyecto u obra final de cada curso atendiendo a la calificación final obtenida. En esta última convocatoria, recibió el premio la alumna del ciclo de Artes Plásticas y Diseño de Grado Superior en Ilustración Nerea Rodríguez García, por su proyecto Animaldario, al obtener la calificación de 9 puntos. El proyecto ofrece a los niños una alternativa de juego y a la vez una herramienta de aprendizaje, por eso optó por ilustrar un juego de cartas que permite identificar diferentes animales y además aprender a través de la gamificación.
En cuanto a los premios Escuelate, convocatoria abierta a los alumnos de ESO, se presentaron estudiantes de La Salle, Sagrado Corazón de Jesús ), Santo Ángel, Santa Clara de Asís, Condes de Saldaña, Jorge Manrique, Recesvinto, IES Santa María la Real , Victorio Macho, Virgen de la Calle y Montaña Palentina. Dada la calidad de los dibujos presentados, el tribunal, compuesto por el Departamento de Dibujo de la Escuela de Arte ha decidido otorgar un primer premio y dos segundos. El máximo reconocimiento ha recaído en la alumna Yolanda Prieto, del Santo Ángel, y los segundos en Sandra García, del Jorge Manrique, y Laura Gallego, del Santa María la Real.