Las matemáticas del pleno otorgan al único concejal de Izquierda Unida-Podemos un papel secundario pero que puede ser un salvavidas para el equipo de Gobierno del PSOE. En caso de abstención de ¡Vamos Palencia! el apoyo de Rodrigo San Martín equilibraría el número de síes (10 del PSOE y 1 de IU-P) con el de noes (8 del PP y 3 de Vox), lo que permitirá aprobar el presupuesto con el voto de calidad de la alcaldesa.

Aunque esa oportunidad está en la recámara, el PSOE no podrá contar con ella para sacar adelante las cuentas de este año. Y es que el propio San Martín anunció ayer que el equipo de Gobierno no contará con el sí de Izquierda Unida-Podemos para la aprobación de unos presupuestos municipales que «dejan mucho que desear».

«Estas cuentas son consecuencia de la decisión de congelar los impuestos. Siguen existiendo decisiones que no compartimos, como el recorte en los planes de empleo, la inversión de 170.000 euros destinada a la creación de una Oficina de Atracción de Empresas, los 30.000 euros para cambiar las butacas del teatro y el aumento desmesurado en la partida de órganos de Gobierno y asesores eventuales mientras el aumento en cuestiones sociales es ínfimo», argumentó.

Por otro lado, San Martín se anotó el mérito del incremento de la partida de obras y asfaltado en  150.000 euros, una de las cuestiones que Izquierda Unida-Podemos considera fundamental. «Ahora bien, queda por ver si cumple con su palabra y destina ese dinero a los barrios», aseveró el edil, que rechazó un apoyo a las cuentas «al no compartir los objetivos que se ha decidido priorizar por parte del equipo de Gobierno».