A nzejs Pasecknics llegó al Zunder Palencia tras completar una irregular temporada con el Betis (que acabó descendiendo) y una presencia que acabó siendo residual en el Mundial con su selección, la de Letonia. Era una apuesta de la dirección técnica. Y poco a poco no sólo se ha hecho imprescindible en el cuadro morado, sino que ahora mismo es la clara referencia, el jugador franquicia.
Ante el Girona realizó un partido soberbio, el mejor de su carrera en la Liga Endesa, siendo factor clave en el primer triunfo morado a domicilio. Completó unos sensacionales números que le han llevado a ser el MVP, el mejor jugador de la jornada en la ACB. Histórico también para el Zunder, al ser el primero en alcanzar ese logro.
En sus 26'51'' anotó 29 puntos (23 en la segunda parte). Convirtió 10 de 18 en canastas de dos (56%) y 9 de 12 desde la línea de personal (75%). Por primera vez en su carrera llegó a los diez rebotes (siete defensivos), robó un balón, realizó un tapón y provocó once personales de jugadores rivales, sumando 38 créditos de valoración. Mejoró en sus puntos débiles hasta el momento: los tiros libres y las faltas personales y ganó en personalidad.
WHITTINGTON. Mientras que Pasecniks es la cara, el norteamericano Greg Whittington ha sido la cruz. En pasado, porque en la noche de ayer el club colegial y el jugador norteamericano llegaron a un acuerdo para separar sus caminos. Era más que evidente que el club no contaba con el ala-pívot y que las horas de Wittington en la entidad morada estaban contadas. De hecho, el pasado fin de semana no era convocado por Luis Guil. Con 14 jugadores en plantilla, habría que hacer dos descartes. Ndiaye lo será en las próximas semanas y meses debido a que será intervenido esta semana de su menisco. Al tener restar cuatro jugadores de cupo nacional o de formación, ninguno de ellos podía ser cortado para el encuentro en Girona. Y el elegido era Whittington. Prueba evidente de que su futuro en el Zunder estaba más que en entredicho. Así lo vio el jugador, su agente y el club y el acuerdo ha sido inmediato.
Queda, por lo tanto, una ficha libre de extracomunitario, un jugador que por fin pueda ser determinante. Un ala pívot que imponga y se imponga y así poder actuar de tres el otro extracomunitario, Piñeiro. Se daría un plus de calidad, fuerza y energía.
Whittington vino a relevar a Leissner, que fue una absoluta decepción. Mejoró sus números, entre otras cosas porque era imposible igualarlos o empeorarlos. Pero su aportación no fue ni mucho menos la esperada. Jugó diez encuentros de morado, con una media de 23'50'' minutos, aportando 5,3 puntos por partido, 4,1 rebotes, 0,8 asistencias, 0,1 tapones, 0,6 personales recibidas y 4,9 créditos de valoración. Números que no se corresponden con un jugador llamado a ser determinante. Su mejor encuentro anotador fue ante el Baskonia, con trece puntos, y el de más valoración ante el Casademont Zaragoza, con 16 puntos. Números mediocres.