El último año ha venido cargado de retos y nuevos proyectos en los grandes municipios de la provincia (Aguilar de Campoo, Guardo, Venta de Baños y Villamuriel de Cerrato), que no cejan en su empeño de mejorar sus infraestructuras, mantener sus servicios y poner en funcionamiento otros nuevos que redunden en la calidad de vida de sus vecinos. Los medios humanos son limitados, y los recursos económicos no son siempre los suficientes, pero en ningún caso escatiman esfuerzos.
El balance es «muy positivo» en Venta de Baños. «Estamos alcanzando grandes acuerdos con la oposición en beneficio de todos los vecinos del municipio», resume el alcalde, José María López, como uno de los grandes logros del presente mandato tras gobernar los cuatro años anteriores con mayoría absoluta.
Para el regidor cerrateño, la «máxima prioridad» en estos momentos es la sustitución de las obsoletas tuberías de fibrocemento que aún persisten en la red de abastecimiento de la localidad, en cuya modernización trabaja constantemente. Como muestra, en los próximos días arrancará una nueva obra, así como el arreglo de calles en Baños de Cerrato. Asimismo, trabajan en el expediente que se traducirá en la renovación total del alumbrado público del término municipal.
Pero sin duda, uno de los grandes logros, a la par que uno de los últimos quebraderos de cabeza para esta y las anteriores corporaciones municipales, es la erradicación del chabolismo. Un problema que se dilata en el tiempo y que pronto pasará a ser parte de la historia, pues en este último año el Ayuntamiento venteño ha adquirido y reformado un total de cuatro viviendas en el casco urbano en las que se instalarán en un futuro próximo las familias que viven en las chabolas. Como siguiente paso, el Consistorio se reunirá con las familias afectadas para conocer de primera mano sus necesidades antes del traslado definitivo.