El vicerrector del campus de La Yutera de la Universidad de Valladolid (UVa), Julio Javier Diez Casero (Villaviudas, 1968), cumplirá mañana dos meses en el cargo. Licenciado en Biología por la Universidad de Salamanca y doctor por la Politécnica de Madrid, comenzó su etapa laboral en la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias (Etsiiaa) de Palencia en 1995, donde actualmente es catedrático de Producción Vegetal.

¿Cómo llegó al frente del vicerrectorado palentino de la UVa? 

Acepté porque me ofrecieron este cargo, que es de libre designación del rector de la UVa, Antonio Largo, y porque creo que podemos hacer algo para mejorar el campus y Palencia.

¿Qué balance hace de la etapa de su antecesora?

Amalia Rodríguez es un ejemplo. Cuando tomé posesión del cargo, una de las cosas que dije fue que con quedar un poco por debajo de donde ella ha dejado el listón me daría por conforme. Ha sido una persona que ha estado pendiente siempre de todo y, utilizando términos académicos, su labor ha sido de sobresaliente.

Lleva de vicerrector de La Yutera desde el 12 de diciembre. ¿Cómo están siendo estos primeros meses en el cargo?

Estoy aterrizando todavía y cogiendo los mandos de la nave. Por ahora, estoy tomando conciencia de la dimensión real que tiene este cargo porque desde fuera no sabes lo que conlleva exactamente ni las cosas que puedes hacer ni su trascendencia. 

Estoy también en la etapa de conocer gente tanto de la universidad como de la ciudad, donde hay personas muy interesantes y con muchas capacidades y posibilidades de colaborar con el campus para llevar a cabo cosas. Incluso me estoy reencontrando con antiguos amigos del instituto que hacía tiempo que no veía. 

Cuando me preguntan por el puesto digo que es muy entretenido y muy bonito, aunque quita mucho tiempo porque tiene numerosas tareas.

¿El cargo de vicerrector es como lo esperaba?

Parecido, pero hay bastantes más obligaciones y tareas que hay que hacer y que no me esperaba. Hay que tener en cuenta que el trabajo de vicerrector en una ciudad pequeña como esta tiene sus ventajas y sus inconvenientes, pero viene a ser el rector de Palencia para lo bueno y para lo malo. 

A cualquier acto te terminan llamando, algo que agradezco mucho. Esto sería una labor de representación, pero la trascendencia e incidencia de las actividades de la universidad también es mucho mayor que en un lugar más grande, como puede ser Valladolid. Incluso pueden tener más efecto sobre la vida de la ciudad. Esa es la impresión que tengo hasta ahora.

¿Con qué dificultades se está encontrando en esta etapa?

Es un puesto que me gusta y que me hace estar con gente interesante, como he dicho antes, pero es cierto que quita tiempo. Me he tenido que descargar de gran parte de la docencia, que como vicerrector puedo hacer algo. Estoy pendiente de todos los alumnos todavía, pero no doy clase. En investigación sí que continúo. Fue una de las condiciones que puse cuando entré de vicerrector. Lo que pasa que ahora hay que sacar tiempo de otros lados. Eso implica estar mandando mensajes a horas intempestivas. 

No obstante, en el laboratorio hay gente muy buena y muy capaz que está supliendo el tiempo que les estoy quitando. 

A corto plazo, ¿qué objetivos se ha planteado?

La gente conoce la universidad y el campus, pero a veces nos dicen que no se dan cuenta de lo que hacemos, que es mucho. Lo que quiero es difundir al detalle todas las actividades que se hacen. En La Yutera se hacen cosas muy interesantes. Hay compañeros con grupos de investigación que llevan a cabo trabajos que pueden tener trascendencia en la vida de la ciudad, pero también a nivel nacional o más allá. Esta sería una de las tareas que me gustaría llevar a cabo.

A partir de ahí, quiero que la ciudad vea el campus como una herramienta y que La Yutera pueda ayudar a la vida de Palencia y de la provincia resolviendo problemas que en estos momentos se puedan generar a nivel local o empresarial. No invento nada. La universidad es investigación y docencia. Formamos egresados con muchas capacidades y, por otro lado, intentamos resolver problemas a través de la investigación.

El grado de Ciencias Gastronómicas comenzará a impartirse en la Etsiiaa en el curso académico 2024/2025. ¿Cómo se organiza una carrera desde cero?

Es complicado, pero también es un reto de este año. Es algo bonito y nos vamos a volcar en ello. La gran mayoría de asignaturas de Ciencias Gastronómicas no se impartía y hay que tener unas instalaciones para el grado. Hay que construir unas buenas cocinas para las prácticas de los estudiantes y estamos buscando financiación. Pero estará listo para septiembre.

¿Otro de los desafíos es que Biotecnología se ofrezca en el curso 2025/2026?

Sí. Lo hemos solicitado y estamos esperando a la evaluación. Esperamos que nos lo concedan y debiera de llegar en septiembre de 2025, aunque aún falta el informe favorable de la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Castilla y León (Acsucyl). Es un reto, pero también una gran oportunidad. Vendrían 45 alumnos a una titulación que está muy demandada y llegarían estudiantes con altas capacidades. Y en toda actividad, cuanta más capacidades tengas más libertad y más posibilidades tienes de hacer cosas interesantes, lo cual es vital para Palencia.

¿Aspirará a que haya más titulaciones en La Yutera?

Las titulaciones empiezan, pero hay que asentarlas. Con Ciencias Gastronómicas me tocará estabilizar los primeros años y hacer que funcione.

En estos momentos, ¿qué puntos fuertes tiene el campus palentino?

La Yutera es el único campus de Castilla y León que tiene cerradas las ingenierías verdes. Es el campus verde por excelencia. Somos uno de los campus con mayor superficie en invernaderos de la comunidad y el único invernadero de seguridad de la región está aquí.  Además, ahora llega Comercio, que está entre Palencia y Valladolid, por lo que se establece una posibilidad más y nos da más capacidades. 

Por otro lado, la educación en Castilla y León es buena. Dicen los informes que está Finlandia en primer lugar, pero si hiciéramos la media autonómica quedaríamos por encima. Y tenemos una Facultad de Educación.

En los tres centros se hace investigación de todo tipo. En Agrarias somos referencia y la escuela tiene muy buenos grupos de investigación, que llegan a ser referencia nacional y mundial. A nivel de la UVa somos de los que más actividad investigadora tenemos. Una referencia de ello puede ser la última convocatoria de la Junta de Castilla y León, en la que se dieron cuatro proyectos de investigación a la universidad y dos vinieron al campus palentino.

No es un campus universitario muy grande, pero para una ciudad como Palencia es esencial. Es una suerte que tenga este campus. Y Palencia tiene que tirar de él y este tiene que contribuir al crecimiento de la capital y la provincia como motor de la generación de conocimiento y del emprendimiento.

¿Qué líneas quiere que sigan los grupos de investigación, cátedras e instituto de La Yutera?

Todos ellos tienen su autonomía y deciden los proyectos en los que se embarcan y a quien contratan. Ya he comentado que quiero que la ciudad conozca cada vez más las actividades que se hacen en La Yutera, pero, por otro lado, quiero que nos adaptemos a las necesidades de la ciudad y de la provincia. Hay que hacer investigación básica y también aplicada al medio en el que estamos. 

Una línea fundamental para Palencia y toda la comunidad son las Ciencias Agrarias. Hay que cultivar cosas que den más valor añadido que los cereales y que diversifiquen la agricultura, que, al ser un componente principal de la economía, también se diversifica esta. Pero los agricultores no pueden hacerlo solos.

¿Cómo afectará al campus la entrada en vigor de la nueva Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU)?

La ley está vigente, pero los recursos económicos todavía no han llegado. Entonces, las universidades no saben cómo abordar este problema. Hay un gran número de horas que hay que impartir y no hay suficiente profesorado. Será una cosa temporal y puntual que se va a resolver, pero nos va a hacer trabajar más de lo que esperábamos en algunos aspectos. Y luego, a ver si realmente sirve para dar más excelencia a las universidades. Ahora mismo, es una oportunidad y tenemos que ver cómo se materializa y su éxito dependerá de los recursos. Se habla de que contratará mucho profesorado, pero tiene que haber dinero para ello.

¿Qué reclamaciones le ha hecho al rector de la UVa en relación con Palencia?

Una de las razones por las que soy vicerrector es porque el equipo rectoral de la UVa ha apostado por el campus palentino. Le he pedido al rector más recursos en las líneas en las que estamos trabajando, tanto en Educación como en Comercio y Relaciones Laborales y Agrarias, y que, sobre todo, primen la excelencia. Eso es fundamental. Es vital. En investigación en ciencia tenemos que contar con los mejores. En la universidad hay que trabajar así. 

En definitiva, que doten de los máximos recursos y, por otro lado, que nos ayuden a fichar la excelencia, que ahora mismo es muy complicado. No hacemos más que sacar plazas de posdoctorado, que ya están bastante tecnificadas, y Palencia no es muy atractiva y se han llegado a quedar desiertas. No es llamativa y es un problema que tenemos. 

Palencia está sufriendo la segunda despoblación y no crece. Tenemos que crear un caldo de cultivo para que la gente no se vaya y haya personas capaces de venir. Eso es una cosa nuestra, de la Cámara de Comercio y de las administraciones. Es muy difícil, pero por lo menos hay que empezar sentando las bases para dentro de diez o quince años. Una de las primeras cosas que hay que hacer es poner en valor la vida en Palencia. Mucha gente habla de una ciudad pequeña, pero se vive bien. Estás en el medio de la nada y cerca de todo. En una hora y cuarto estás en Madrid. Si me pones en un extremo, la gente que vive en Madrid tarda, de media, en llegar al trabajo una hora y media.  Y también hay que poner en valor un campus pequeño, lo cómodo que es y que seas capaz de conocer a los profesores. Y eso tiene para mí mucho valor.

La Etsiiaa eligió un nuevo director, Luis Miguel Cárcel, que tomará posesión mañana. ¿Cómo definiría al nuevo responsable del centro y qué espera de él?

Cárcel es una persona con mucho sentido común, un trabajador incansable que, si tiene que quedarse noches y noches para terminar un proyecto, un plan o una nueva titulación, lo va a hacer y atesora muchas capacidades de gestión. Es una persona con mucha experiencia, ya que ha estado de subdelegado del Gobierno en Palencia y de concejal de Hacienda en el Ayuntamiento capitalino. Creo que su elección es un acierto para la Etsiiaa y se va a notar. 

Para mí es una muy buena noticia su nombramiento porque sé que habrá una buena sintonía, que vamos a trabajar juntos en la misma dirección y que el resultado creo que será muy bueno para la universidad.

La Facultad de Educación encadenó dos procesos electorales a decano sin candidatos. ¿Cómo se va a solucionar?

A lo mejor, como no hay mucho profesorado, tampoco quieren comprometerse. No es lo que se espera, pero estamos mirando formas de solucionarlo. Anteriormente estuvo Alicia Peñalba y seguramente, por categoría, le toque a Jesús Valero. 

Durante años se ha hablado de la integración de la Escuela de Enfermería en la UVa. ¿En qué estado se encuentra esta idea?

La escuela es de la Diputación, aunque hay parte integrada. Toda la gestión de matrículas está dentro de la UVa. En su momento se habló de ello, pero todavía no he tenido la entrevista con la presidenta de la institución provincial, Ángeles Armisén. Esta semana hablaré con ella y le preguntaré su opinión.

Una reivindicación del campus  es la construcción de una pasarela en la avenida de Madrid que una todos los edificios de La Yutera

Es una cuestión que siempre salía en elecciones, pero es necesaria. Es complicado atravesar una autovía y  creo que hay que hacer esa pasarela. El campus tendrá que crecer y, si llega Biotecnología, seguramente haya que hacer edificios nuevos y habrá más volumen de estudiantes.

Anteriormente, la Casa Junco, que se encuentra en plena calle Mayor, fue la sede de la UVa en el centro. ¿Les gustaría que hubiera un edificio en estos momentos que cumpliese la misma función?

En su momento, el uso de la Casa Junco fue una estrategia para acercar la universidad bajando a la ciudad. Estuvo funcionando 10 años y nosotros sí que la usamos bastante. Se leyeron muchas tesis e hicimos hasta congresos y exposiciones. Ahora la estrategia es distinta. Intentamos que la ciudad venga aquí. Es tarea nuestra llevar a cabo actividades que permitan que los ciudadanos de Palencia acudan motu proprio al campus. Estamos pensando en varias cosas.

Por último, ¿qué intenciones tiene a largo plazo?

A largo plazo lo que quiero es que el campus ayude a solucionar los problemas graves que tiene la ciudad. Es difícil. Puede ser un brindis al sol, porque no va a depender de nosotros. Pero muchas veces, aunque no seamos capaces de solucionarlos, sí somos capaces de dar las directrices para que se puedan solucionar o mitigar.

Ademas, busco que el campus sea capaz de tener profesores y alumnos con mayores capacidades y que, de forma más efectiva, pueda solucionar problemas y conseguir patentes o spin-off.