La Audiencia Provincial dejó ayer visto para sentencia el juicio seguido contra un palentino, de 70 años, acusado de dos delitos continuados de abuso sexual y otro también continuado de exhibicionismo, teniendo como víctimas a dos hermanos, un niño y una niña de seis y ocho años en el momento de los hechos, respectivamente, pertenecientes a una familia que mantenía con el acusado una estrecha amistad.
El acusado, para quien el fiscal pide 13 años de prisión otros once de libertad vigilada y una indemnización global a favor de las víctimas de 40.000 euros por daños morales, se reiteró en sus postulados, mientras que el acusado negó tajantemente los cargos que se le imputan. Eso sí, reconoció en la vista oral que conocía a los pequeños y a su entorno. Por lo demás, la madre de las criaturas declaró detrás de un biombo, mientras que los niños lo hicieron a través de videoconferencia. Cabe recordar que la acusación solicita para él un global de 14 años de cárcel, mientras que la defensa su libre absolución.
Los hechos ocurrieron entre 2018 y 2020. La Fiscalía pormenoriza sobre viajes realizados por el acusado y los niños a distintas capitales del norte de España o incluso en su casa, donde, al parecer, cometió abusos sexuales especialmente con el niño, aunque siempre en presencia de la niña. Los menores narraron a su abuela lo ocurrido el 6 de agosto de 2021, por lo que la familia procedió a interponer la denuncia.