Compartir los logros con los seres queridos está bien, pero hacerlo con una ciudad entera es aún mejor. Esto es lo que le ocurre a diario a Glide Kessy, una fantástica emprendedora que el pasado 12 de mayo decidió abrir las puertas de su propio negocio. Hoy, nueve meses después, asegura estar «contenta» con la acogida, mientras no duda de que seguirá ofreciendo los mejores servicios a todos sus clientes, tanto a los ya habituales como a los nuevos.
Acudir al bar Manhattan, ubicado en la avenida Brasilia, número 14, es una buena opción para calmar la sed o saciar el apetito. Levanta la persiana a las ocho y media de la mañana, momento propicio para tomar un café y empezar la jornada de la mejor forma.
De hecho, ofrece uno desayunos bastante completos, pues al café le puede acompañar una tostada con mermelada, un crujiente cruasán o un exquisito pincho de tortilla. Es más, esta no es solo con patata, pues también puede estar rellena de jamón york, queso, cecina e incluso de langostinos. Un sinfín de opciones entre las que elegir se torna complicado.
A lo largo de la mañana no faltarán los pinchos de tortilla, los bocadillos, los sándwiches o las pulguitas de chorizo, panceta, chistorra o lomo con queso. Aunque es, a partir de las 13 horas, cuando la cocina comienza a elaborar su larga lista de raciones. Rabas, alitas, nuggets de pollo, patatas bravas o fritas, croquetas, queso... así hasta completar una carta variada y totalmente casera.
Por supuesto, el bar Manhattan también ofrece tapas variadas a todos sus clientes con cada consumición. Si pide un café lo acompañará un trocito de bizcocho o una pequeña magdalena, siempre elaboradas por Glide Kessy. Pero si su comanda está formada por un refresco, un vino o una caña serán los platos salados los que pueda probar. De hecho, hay pequeños bocados que se han hecho famosos por servirse un único día a la semana, como la paella o el arroz negro de los domingos.
Auténticos manjares que se pueden degustar a diario en este establecimiento hostelero, con un local amplio y una cuidada terraza.